Hoteles donde enseñan a dormir y las pautas de los que saben hacerlo
Más de cuatro millones de españoles afirman no disfrutar de un sueño reparador, según la Sociedad Española de Neurología.
Estos cinco hoteles disponen de aplicaciones, colchones que monitorizan, aparatos que enmascaran los sonidos del exterior, almohadas que abrazan y hasta un bosque a los pies de los clientes.
Entre los hábitos que mejoran el sueño, cenar pronto, no hacer ejercicio después de las 19.00 horas o meditar.
Estrés, malos hábitos, fatiga pandémica, vuelta a una rara normalidad… No son condiciones para un buen descanso. De hecho, dormir bien se está convirtiendo en un lujo. Más de cuatro millones de españoles (10% de la población total), y más de 12 millones (30%) aseguran que se despiertan con la sensación de no haber tenido un sueño reparador o finalizan el día muy cansados, según datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN). Esto significa que alrededor de un 40% de la población española ven amenazada su salud y calidad de vida por sus problemas en el descanso.
Si te reconoces en estos datos, quizá has pensado que vas a darte el capricho de ofrecerte un descanso real. Si esta es tu opción, los siguientes hoteles te lo van a poner fácil.
MÁS
Hotel Healthouse Las Dunas: colchones que monitorizan
Este complejo de salud y dietética situado entre Puerto Banús y Estepona, en Málaga, es el primer hotel de España en ofrecer un colchón inteligente a sus clientes. El programa Ekilum Health & Balance ofrece la oportunidad de experimentar el Método Healthouse, basado en la acción holística de tratamientos relajantes, alimentación y sueño.
El control de sueño se mide a través de un colchón capaz de monitorizar de forma no intrusiva los movimientos, la posición, las fases del sueño y otras variables fisiológicas para mostrar un índice de calidad del sueño. También es capaz de interactuar procesando los datos para aprender la dinámica de cada sesión de descanso. Así, este colchón inteligente va modificando su estructura para adaptarse a las necesidades de descanso de cada usuario.
Six Senses Douro Valley: comprometidos con el descanso
Nació obsesionado por la sostenibilidad, pero, seis años después de su creación, ofrecer un buen descanso es su mayor objetivo. Las habitaciones de este hotel portugués miman todo lo que tiene que ver con el sueño: colchones artesanales, almohadas orgánicas, sábanas de algodón de máxima calidad, pijamas de fibra de bambú, bolsitas de lavanda para descongestionar las vías nasales y un spray de jazmín para perfumar la almohada.
Cuenta también con el Sleep Program para analizar la calidad del sueño de los clientes y ofrecer pautas para mejorarla. El encargado de hacer esto es el Withings Aura Sleep Tracker, un aparato que recoge los datos de un sensor que, colocado bajo el colchón a la altura de nuestros hombros, toma nota de nuestro sueño.
Hoteles Travelodge: pensados para los viajes de trabajo
Sí, los viajes de trabajo han vuelto. Y con ellos, la incomodidad de los que no se acostumbran en camas extrañas. Por esta razón, Travelodge España pone a disposición de sus clientes las cuddillow, almohadas envolventes que abrazan a sus usuarios para ayudarle a conciliar un descanso reparador. La clave está en la calidad de sus tejidos y en el material con el que están hechas: el memory foam, una espuma de grandes prestaciones que se adapta a las formas de cada persona. Las almohadas cuddillows siempre están a disposición de los clientes bajo petición.
Hyatt Place Nashville Downtown: el descanso más tecnológico
Este destino es mágico para viajeros con posibles y cuya ilusión sea conocer la cuna del country y alcanzar un grado alto de bienestar. El Hotel Hyatt Place Nashville Downtown de Tennessee tiene entre sus servicios ayudar a conciliar un sueño sin interrupciones. ¿Cómo? Sus habitaciones disponen de una instalación que enmascara el ruido perturbador de la calle y crean un ambiente de paz y tranquilidad. El cliente podrá regular la intensidad y cambiar el sonido que más le guste: el oleaje del océano, el viento de las praderas o el ruido de cascadas, entre otros.
Cabañas en los árboles de Zeanuri: lo natural es descansar
De vuelta a España, un hotel con otro concepto de descanso, protagonizado por la naturaleza. La propuesta de Cabañas en los árboles, en Zeanuri (Vizcaya), es 'envolver' al cliente en un estado de bienestar y tranquilidad. En él no hay nada que te recuerde al estrés diario: solo tú, una cabaña suspendida en un árbol y el bosque a tus pies. Aquí no hay aparatos que simulen nada, sino los propios sonidos de la montaña. Se necesita poco más porque en ese ambiente el descanso está garantizado, pero puedes otro homenaje en su spa ecológico.
Las cosas que no hay que hacer para dormir bien
Todos estos hoteles ayudan a descansar mejor, pero no harán milagros si no cumples ciertas pautas que favorezcan un buen descanso. Expertos como los de la plataforma de bienestar holístico Gympass o los creadores de la aplicación Synctuition, especializada en terapia del sueño explican qué es lo que no debemos hacer si queremos descansar bien.
Dormir cinco horas
Es frecuente ver personas que sacrifican horas de sueño por trabajo, ocio o simple 'enganche' de redes sociales. Dormir menos está directamente relacionado con problemas de salud como obesidad, diabetes y enfermedades cardiovasculares, entre otros. Además, cuando dormimos poco, el cerebro hace un mayor esfuerzo para mantener la atención, favoreciendo estados de ira o de ansiedad. Un cerebro cansado es un cerebro disminuido.
Recuperar el fin de semana
Puede ser que llegues a alguno de estos alojamientos con la intención de recuperar el sueño perdido. Quizá recuperemos las horas, pero no podremos revertir el daño ni corregir la calidad del descanso. El cuerpo debe tener un patrón de sueño constante. Tener horarios descompensados aumenta la posibilidad de tener cuadros ansiosos o de estrés y también aumenta la probabilidad de sufrir insomnio.
Dormir (o no) en completa oscuridad
Las preferencias para conciliar el sueño son muy personales. Las cualidades de la almohada, el colchón o el grado de oscuridad de la habitación son propias de cada persona. Para algunos, es necesario algo de claridad; para otros, no puede colarse un rayo de luz. En ese caso, además, de bajar persianas, echar cortinas y apagar todas las luces, vendrá bien tener un antifaz de buena calidad, que sea ligero, completamente opaco y transpirable.
Quedarse dormido viendo la tele, lo mejor para relajarse
Es un mito extendido, pero lo cierto es que tratar de conciliar el sueño delante de la televisión, el móvil o cualquier otro tipo de pantalla retrasa la producción de melatonina del cuerpo, una hormona natural segregada por el organismo, que es la responsable del sueño.
Tomar un vino
El vino y el alcohol, en general, pueden producir una falsa sensación de somnolencia inmediata. Pero la dificulta la fase de sueño profundo y reduce drásticamente la calidad del descanso. El alcohol interrumpe la etapa de sueño REM, la más profunda y la que predispone al mejor sueño. El resultado es que a la mañana siguiente no podremos rendir ni dentro ni fuera del trabajo.
Cansarse haciendo deporte
El deporte facilita la conciliación del sueño, ya que promueve la liberación por el organismo de endorfinas que son sustancias que propician una sensación de bienestar y relax. Sin embargo, no se aconseja practicar ejercicio a última hora del día. La actividad deportiva también eleva los niveles de cortisonas y adrenalina, sustancias contrarias a la hormona del sueño. Lo aconsejable es no hacer deporte después de las 19:00 horas.
Lo que sí hay que hacer
Aunque no hay recetas mágicas, sí hay ciertas pautas que revertirán en un buen descanso. De hecho, todos los hoteles que mencionamos se distinguen por cumplir todas las recomendaciones que ofrecemos. Un buen sueño no es algo automático, sino que se va trabajando a lo largo del día y tiene que ver con nuestro estilo de vida.
Consumir alimentos que ayudan a dormir y evitar otros
Existen alimentos que contienen sustancias que afectan al sistema nervioso central y tienen una acción directa sobre el sueño, como la cafeína, el cacao o el picante. También será importante tener en cuenta alergias o intolerancias a determinados alimentos y que pueden provocar flatulencia, acidez o reflujo y entorpecer el sueño, así como alimentos diuréticos. Por último, también será importante cenar platos fáciles de digerir e irse a la cama al menos dos horas después de cenar. Entre los alimentos más recomendables, los que tienen triptófano, como el plátano, el huevo, los lácteos, el pavo o los frutos secos.
Tener un buen equipo de descanso
Un lugar despejado, armonioso, sin contaminación visual... Los fans de Marie Kondo saben de lo que hablamos. Aficionados o no al orden, lo cierto es que las estancias ligeras favorecen el descanso. En cuanto a la almohada y colchón, son los básicos del equipo de descanso. Invierte en ellos, déjate asesorar y sigue tus gustos, sin dejarse arrastrar por modas. La ropa de cama es la guinda del pastel: mejor de algodón o fibra de bambú, y lo más natural posible. Importante: sigue siempre las recomendaciones del fabricante a la hora del lavado y planchado.
Desconectar meditando o en silencio
La meditación es una práctica muy beneficiosa para rebajar la actividad del sistema nervioso. A través de la respiración el nivel de ansiedad y tristeza disminuye. Si no eres experto, hay muchas aplicaciones y recursos online que te permitirán disfrutar de una meditación guiada. Aquí no existe el concepto de hacerlo bien o mal, el simple hecho de prestar atención a la respiración ya es beneficioso para la salud. Si te agobia o te parece algo raro, hay algo aún más sencillo: disfrutar del silencio. Apaga todos los aparatos y permanece unos minutos callado y quieto. Con esta pauta, que puedes incluir en tu rutina diaria, el organismo es capaz de dormir durante más horas seguidas, dejando de lado el estrés.