Pasear por el supermercado es peor que atravesar un campo de minas. Y si no lo crees es que aún no eres consciente de muchas cosas. Cada pasillo, un drama. El marketing se ha hecho protagonista de un sinfín de productos que nos engañan de forma más o menos hábil. Para intentar destapar estas pseudomentiras u ocultamientos hablamos con nuestro colaborador José Manuel López Nicolás, catedrático de Bioquímica y Biología Molecular y autor del libro 'Un científico en el supermercado'.

Una vez sentado en el plató le proponemos un juego. Hacer un recorrido virtual por los pasillos más comunes del ‘súper’ para conseguir así una especie de biblia que seguir a la hora de hacer la compra. Sorpresa e indignación a partes iguales. Ni una sola sección se salva y los mitos que las rodean son muchos y variados. Desde las bebidas détox hasta el atún rojo, pasando por los ultraprocesados.

Si damos un paso mirando las etiquetas de los productos del supermercado, dos de las palabras que más encontramos son 'con' y 'sin'. En la frutería, en la carnicería, en el pasillo de los lácteos, de las bebidas, en la bollería y seguro que, si buscas, también en alguno más. "Anunciar, por ejemplo, una verdura sin pesticidas es absurdo. Los últimos informes de la Unión Europea afirman que los niveles de pesticidas que se encuentran en frutas y verduras están muy lejos de suponer un peligro para la salud", asevera López Nicolás.

Algo muy similar pasa los lácteos. 'Sin lactosa', 'con Omega 3', 'con calcio' y un sinfín más. "En los últimos años se han multiplicado los productos sin lactosa. La lactosa, si no eres intolerante diagnosticado, no hay ningún problema. Es más, si una persona sana consume habitualmente productos sin lactosa puede llegar a convertirse en un intolerante. A la población en general pagar dos o tres veces más por esos productos no tiene sentido", explica el científico.

Tan malo es el defecto como el exceso. Seguro que alguna vez has estado tentado a comprar, o incluso has comprado, un producto enriquecido con… "Lacteos enriquecidos con lactobacillus casei, con isoflavonas de soja, es una mentira. Hace unos años los lácteos podían decir que ayudaban a todo, al sistema inmunitario, al colesterol, a las defensas... Ahora la Autoridad Europea no se lo permite a no ser que demuestren que es cierto. Ni las isoflavonas sirven para la menopausia ni los lactobacillius a las defensas, ni nada".

López Nicolás se dirige a los lectores de Uppers para hacernos una recomendación. Nos desvela qué cosas debemos tener en cuenta a la hora de hacer la compra para no dejarnos engañar.

Si quieres realizar el recorrido virtual completo por el supermercado y descubrir cuáles son los productos de los que debemos huir no te pierdas el vídeo (dale al play).