Un buen licor o bebida mientras te relajas leyendo, charlando o contemplando el atardecer siempre es un placer para uno mismo. Disfrutar de esos sabores explosivos en el paladar que despiertan por completo las papilas gustativas es una sensación única. Con cualquier bebida no se consigue eso, por ello siempre tienes guardada alguna botella para ocasiones especiales en las que te apetece tomar una buena copa. Lo que quizá nunca te has planteado es cuáles son las bebidas más caras del mundo. ¿Serán muy distintas a las que tomas? Te descubrimos algunas botellas que no están, para nada, al alcance de cualquier mortal.

Probablemente estemos ante una de las botellas más caras del mundo, de esas que han entrado en la casa de muy pocas personas. Ya de por sí, el cognac Henry IV Dudogmon Heritage es uno de los más valorados en el mundo, pero justo esta botella es el resultado de 100 años de maduración en barrica de roble. La botella está valorada en unos dos millones de dólares, algo lógico si se tiene en cuenta con está hecha de oro de 24 quilates y platino de ley, con más de 6.000 diamantes blancos incrustados en la botella.

Si eres amante del ron, estás ante el más caro del mundo, compuesto por siete de los rones más raros que se pueden encontrar. El proceso de producción duró seis años y cada ron envejeció en barriles de roble americano, teniendo el más joven de los caldos solo 17 años. Esta bebida surgió hace unos años para la celebración del 50 aniversario de la independencia de Trinidad y Tobago. Se crearon unidades limitadas, valorando cada botella en unos 20.000€. El decantador es una autentica pieza de coleccionista, diseñado expresamente para este ron.

Es, probablemente, la botella más cara del mundo, valorada en unos tres millones y medio de dólares. Ley Diamante es el nombre por el que se conoce a esta botella de tequila, creada por el mismo diseñador que hizo la Henry IV Dudognon Heritage Cognac Grande Champagne. La botella está fabricada en cerámica y platino y tiene más de 6.000 diamantes incrustados. Tanto la bebida como su exterior están perfectamente cuidados para conseguir el tequila ideal que represente a México.

Más que por su interior, el precio tiene que ver con el exterior, con su botella. Esta edición, llamada Chambord Royale Deluxe cuenta con su característico licor de frambuesas por el que tan famoso es. La botella esta forjada a mano en oro amarillo de 18 quilates con perlas incrustadas, además de tener más de 1.000 diamantes. Ese gran envoltorio hace que su fabuloso licor de frambuesas se eleve a un precio desorbitado, por más de dos millones de dólares.

Más de un millón de dólares es el precio de este vodka. La bebida rusa por excelencia es de calidad y eso no lo dudamos, pero como pasa con la mayoría de bebidas de esta lista, lo que hace que su precio suba como lo espuma está en su botella. Esta hecha de oro amarillo, aunque en su tapón cuenta también con oro blanco, y su estética fue pensada para emular al diseño clásico de los coches Russo Balt.

Y para cerrar, con la que se dice que es la cerveza más cara, que puede rondar los 1.000€ la botella. Se dice que su sabor es especial, entre el caramelo y el anís. Esta cerveza proviene de una pequeña ciudad belga donde se elabora de manera tradicional, envejeciendo durante 10 años para concentrar ese sabor tan característico que, probablemente, sea lo que hace que su precio se eleve tanto para ser una cerveza.