A Homer Simpson le perdían los donuts, ¡y a quién no! Podríamos estar ante una de las mayores creaciones del ser humano, pero que tantos problemas cardiovasculares presenta. La mayoría de donuts que encontramos en los supermercados o pastelerías tradicionales están elaborados con una gran cantidad de azúcar e ingredientes poco saludables. Se vuelve totalmente imposible saciar el antojo de donut cuando estás en una dieta estricta o quieres cuidar tu alimentación.

Un solo donut de 100 gramos aporta una media de 400 calorías. La cantidad varía dependiendo de si es uno glaseado con azúcar, si es de chocolate o si lleva cobertura o relleno de alguna crema. Por lo general, un donut industrial también aporta unos 25 gramos de grasa, de los cuales 13 corresponden a grasas saturadas.

Si sois de los que a media tarde les entra esa repentina necesidad de comer algo dulce, o no podéis empezar la mañana sin desayunar algo rico y goloso, pero queréis que no sea un dulce cargado de azúcares y grasas, poder moderar la ración y disfrutar, podéis tomar nota de la receta que veréis a continuación:

Puedes terminar estos donuts o donetes saludables con un poco de canela en polvo espolvoreada o con leche en polvo le puedes dar un contraste blanco. También puedes utilizar cacao en polvo o cubrir con un baño de chocolate.

Si tienes una máquina de mini donuts, es el momento de que vea la luz para preparar un bocado dulce a la hora del desayuno, uno de esos aparatos innecesarios pero al que suelo dar uso al menos una vez al mes. Los mini donuts son una versión más ligera que los donuts de verdad, y yo no puedo evitar sentir perdición por su diminuto tamaño.

Puesto que no es una masa muy dulce suelo darles un glaseado sencillo a base de mezclar unas cuantas cucharadas de azúcar glasé con un chorrito de leche. Se pueden dejar tal cual, espolvorear con azúcar o cubrirlos con un glaseado más consistente, incluso con queso crema. Un baño de chocolate fundido también es una alternativa muy recomendable.