¿Cuánto se deprecia un coche nada más salir del concesionario?
Los automóviles se deprecian muy rápidamente, por lo que resulta imposible recuperar el valor de la inversión una vez hayan salido del concesionario
Según los expertos de Carfax, cuando un coche nuevo sale del concesionario pierde automáticamente un 10% del valor por el que se ha comprado, y al final de su primer año de vida pierde otro 10%
Cuántos kilómetros debe tener un coche de segunda mano para comprarlo
Comprar un coche siempre supone una gran inversión. A pesar de que en el mercado podemos encontrar una amplia variedad de precios, para adquirir un automóvil suele ser necesario destinar una buena parte de nuestros ahorros, especialmente cuando el vehículo que vamos a adquirir no es de segunda mano.
Además de las ingentes cantidades que debemos emplear para poder comprar el coche de nuestros sueños, otro aspecto importante que debemos tener en cuenta antes de lanzarnos a la compra es la rentabilidad que podríamos obtener en caso de que decidamos poner nuestro coche a la venta como vehículo de ocasión. Y es que a diferencia de lo que puede ocurrir con otros productos, los automóviles se deprecian muy rápidamente, por lo que resulta imposible recuperar la inversión realizada.
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La depreciación de los coches al salir del concesionario
Esta depreciación comienza muy temprano. De hecho, nada más salir del concesionario los automóviles ya empiezan a perder valor, y a medida que se van utilizando esta pérdida se incrementa.
Según apuntan los expertos de Carfax, el proveedor internacional de historiales de vehículos enfocado en el sector de ocasión, cuando un coche nuevo sale del concesionario pierde automáticamente un 10% del valor por el que se ha comprado. Durante su primer año de vida, esta pérdida se incrementa, y al final del mismo perderá otro 10% de su valor. Es decir: en tan solo un año, habremos perdido, como mínimo, un 20% de la inversión que hemos realizado, ya que no podremos recuperar ese porcentaje.
Transcurrido este primer año, el coche seguirá perdiendo valor. Según Carfax, durante los cuatro primeros años la depreciación promedio se sitúa entre un 15% y un 25% anual, aunque en los modelos y marcas menos atractivos esta pérdida puede ser incluso mayor. De media, aun así, se calcula que un vehículo nuevo perderá hasta un 60% de su valor durante sus cinco primeros años de vida.
Aunque la depreciación de los vehículos es inevitable, hay varios factores que pueden influir en esta pérdida y que, en caso de que queramos poner nuestro coche a la venta, pueden afectar al retorno de la inversión.
La popularidad del vehículo que hayamos comprado, los kilómetros que haya recorrido o su estado físico pueden hacer que la depreciación sea mayor o menor. Por poner un ejemplo sencillo, cuanto más usado y estropeado esté el coche, menor será el valor que nos darán por venderlo.
Además, el color de la carrocería y los extras de seguridad que tengan incorporados también pueden disminuir o aumentar el impacto de la depreciación. En este sentido, desde Carlax recomiendan que los usuarios apuesten siempre por vehículos de un color neutro, ya que son los que menos se devalúan con el paso del tiempo.
De igual manera, la situación del mercado y las tendencias en la oferta y la demanda también pueden afectar a la depreciación de nuestro vehículo, ya que habrá momentos en los que la demanda será mayor y, consecuentemente, el precio que un posible comprador estaría dispuesto a pagar.