Tu moto, como una patena: trucos infalibles para dejarla impecable con desengrasante
Si quieres rematar por completo la limpieza de tu moto el desengrasante puede ser un producto más que necesario
Aún así, se debe utilizar el desengrasante con precaución para no dañar ninguna superficie de tu moto
Limpiar la moto puede convertirse en una de esas tareas que no paras de retrasar y retrasar hasta que ya no queda otro remedio que ponerse manos a la obra. Es cierto que al tener tanto recoveco a veces limpiarla nos va a llevar un buen tiempo, pero el resultado merecerá la pena si quieres volver a verla tal y como la compraste. Eso sí, para un resultado óptimo y que nuestra moto recupere su brillo habrá que utilizar buenos productos, donde el desengrasante tiene un gran protagonismo en su mantenimiento. ¿Preparado para una jornada de limpieza intensa?
Limpieza a fondo
MÁS
Lo primero que debes tener claro es que no vas a utilizar un solo producto, ya que por lo general las motos y sus múltiples piezas cuentan con materiales diferentes que requerirán un tipo de producto u otro para su correcta limpieza. Por ello es normal encontrar en las tiendas especializadas jabones, detergentes y otros productos destinados a diferentes partes del vehículo. Siguiendo estos pasos y recomendaciones lograrás no estropear la pintura o dañar zonas lubricadas.
Así, con un buen cubo de agua podrás dejar reluciente tu moto. Para ello siempre es bueno utilizar una esponja que consiga empaparse bien, pues de esta forma conseguirás evitar cualquier pequeño arañazo que podría producirse por estar algo seca. Además, ten en cuenta que si quieres dejar tu moto verdaderamente reluciente lo mejor será que cambies el agua del cubo si ya está demasiado sucia, ya que sino tendrás el efecto contrario y no quedará tan limpia como esperabas en un principio. Recuerda prestarle especial atención a los lugares más escondidos o a las llantas para que quede del todo limpia.
Desengrasante, el remate final
Pero, ¿dónde entra el desengrasante en todo este proceso de limpieza? Pues depende de la zona, realmente este producto no se puede utilizar en cualquier parte de tu moto, puesto que hay partes para las que puede ser algo agresivo, como para la pintura. Para usar el desengrasante primero hay que realizar la limpieza como te hemos dicho, dejando la moto bien aclarada y sin rastro de jabón. Eso sí, antes de proceder al siguiente paso lo mejor será tapar algunas zonas, como los paneles de control, debido a que son sensibles a este producto.
Gracias al desengrasante vas a poder dejar tu moto perfecta, con una limpieza a fondo como pocas veces has hecho. Es normal que por muy limpia que este tu moto haya zonas donde la grasa se ha ido acumulando poco a poco y sacarla no es tarea fácil, al menos con una limpieza básica con un detergente específico para este tipo de vehículos. Ahora bien, nada de aplicarlo directamente, ya que se aconseja diluirlo en agua en una proporción de un tercio de desengrasante.
Con esa mezcla preparada ya solo falta aplicarla en las zonas donde esa grasa se ha incrustado de forma que parece imposible acabar con ella, pero debes hacerlo con cuidado, no dejando que actúe más de un minuto sobre la superficie para que no la dañe. Tras ello debes retirar la mezcla o bien con un cepillo o bien con un paño para acabar con el rastro de desengrasante. Para rematar enjuaga bien esas zonas donde lo has aplicado para lograr eliminar cualquier resto que pueda ser dañino para la superficie.
Un buen secado, brillo asegurado
¿Quieres darle el toque final? En lugar de dejar secar tu moto al aire seca toda su superficie con un paño de microfibra, lo que evitará posibles marcas de gotas secas y conseguirá un brillo mayor de la pintura de tu motocicleta. Y aunque hayas desengrasado, en caso de que tu moto tenga cadena puedes engrasarla para rematar la limpieza y puesta a punto de tu moto para rugir como nunca sobre el asfalto.