Los romanos pusieron en práctica un sistema de carros de alquiler. No era el taxi que conocemos hoy, pero sí funcionaba como un servicio público urbano. En Roma, también introdujeron los taxímetros: un mecanismo era un eje tiraba de bolas conforme avanzaba el carro; el pasajero pagaba más o menos dinero en función de las bolas liberadas. Más tarde, en el siglo XVII, se fundaron las empresas especializadas en la cría de caballos y transporte. Y el primer taxímetro equipado fue fabricado en 1897 por Daimler. Así lo cuenta el usuario @Albertofm20 en su cuenta de Twitter.
En la actualidad, se han convertido en estampas imprescindibles de la ciudad que recorren durante horas transportando de un lado a otro a cientos de viajeros. Cada ciudad cuenta con modelo, un diseño y un color de taxi diferentes. ¿A qué se debe su elección? Hemos seleccionado algunos de los más singulares y, en el vídeo, te contamos su historia.
En los últimos años, además, han surgido una alternativa a los taxis, los VTC. Este término hace referencia al vehículo de transporte con conductor. La diferencia radica en que en un VTC, el viajero elige el origen y el destino. Asimismo, se trata de un servicio prepago y el precio se calcula antes de contratarse. Por el contrario, los taxis funcionan generalmente con tarifas que se abonan al final del trayecto.