Si algo tienen en común Nelson Mandela, María Teresa de Calcuta, Rigoberta Menchú, Martin Luther King y Theodore Roosevelt es que todos han ganado el Premio Nobel de la Paz, uno de los distintivos más importantes del mundo. Este galardón, que se dio por primera vez en 1901, esconde muchas particularidades y episodios curiosos a lo largo de la historia. Ahora que el premio ha vuelto a primera línea de actualidad después de que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, haya sido nominado al Nobel de la Paz, en Uppers hemos decidido realizado una retrospectiva en clave histórica con datos y otras polémicas que le han rodeado desde su creación.

Alfred Nobel fue un químico, inventor de la dinamita y empresario sueco importante en la historia contemporánea. En 1895 redactó su testamento y creó el premio Nobel, un galardón que debía desdoblarse en 5 áreas diferenciadas: Física, Química, Literatura, Medicina y Paz. Más tarde, en 1968, el Banco Central Sueco creó y financió el Premio Nobel de Economía, que se otorgo por primera vez un año más tarde. El resto de premios se financian a través de la Fundación Nobel, un organismo que fue creado en San Remo, Italia, en 1896, tras su muerte el 10 de diciembre de aquel año. La fundación fue creada para administrar la herencia del inventor, que murió sin descendencia. El Comité Nobel Noruego se encarga de seleccionar a los ganadores del galardón más importante de acerca de los procesos de paz. El ganador recibe una dotación económica de 900.000 euros

A principios de siglo XX, el mundo sufrió la Gran Guerra (1914-1918). Durante aquellos años, el premio no se dio, excepto en el año 1917, cuando fue otorgado al Comité Internacional de la Cruz Roja. Tampoco durante los años de la II Guerra Mundial (1939-1945), especialmente entre el 40 y el 42, cuando Noruega fue ocupada por los nazis. Sin embargo, sí se dio en el 1944 (se lo volvió a llevar la Cruz Roja) y 1945. El galardonado del 45 fue el político estadounidense Cordell Hull, quien lo obtuvo por su papel en la creación de las Naciones Unidas.

Todos los galardonados reciben el premio en Estocolmo, Suecia. Excepto el de la Paz. Este premio, a diferencia del resto, se otorga en Oslo, Noruega. Así lo quiso el creador, quien dejó en su testamento esta especificación. Sin embargo, no explicó los motivos por los que este galardón se da por un comité creado únicamente para seleccionar a los nominados y al ganador o ganadora. Algunas teorías apuntan hacia posibles influencias de su asesor Ragnar Sohlman, cuya mujer era noruega, o por Bjørnstjerne Martinus Bjørnson, escritor noruego, ganador del Nobel de Literatura en 1903 y admirador confeso del empresario sueco.

El Nobel de la Paz ha sido, desde siempre, un constante creador de polémicas. Muchos nominados y premiados han sido duramente criticados por ir en contra del espíritu que dejó Nobel, gran defensor de los derechos humanos y la justicia social. Porque, en el testamento del empresario sueco, el premio se daba "a la persona que haya realizado la mayor o la mejor obra en favor de la fraternidad entre las naciones, por la abolición o reducción de los ejércitos permanentes y a favor de realizar y promover los congresos de paz".

En este sentido, premiados como Barack Obama (quien en 2009 se encontraba en medio de varias guerras en Oriente Medio) o nominados como Iósif Stalin, el mandatario más importante de la historia de la Unión Soviética, que tuvo uno de los ejércitos más grandes y resilientes del siglo XX, suscitaron rechazo en la opinión pública. Hoy hemos sabido que ha sido nominado Donald Trump, quien rompió el acuerdo nuclear con Irán el año pasado y volvió a suscitar tensión en el mundo árabe. Benito Mussolini también lo fue en 1935.