¿Te provoca ansiedad tener el móvil apagado? Pistas de que podrías estar 'tecnoestresado'

La pandemia ha puesto de manifiesto la importancia de las nuevas tecnologías en la vida humana. El teletrabajo, las reuniones virtuales, las llamadas a nuestros hijos... Todo ha quedado mediado por la tecnología. Ello supone, sin embargo, que nos pasemos todo el día frente a la pantalla: según el último informe de la Sociedad Digital en España, el 38 % de la población pasa el mismo tiempo en el móvil que hablando cara a cara con otra persona. La psicóloga Gabriela Paoli, autora del libro 'Salud Digital: claves para un uso saludable de la tecnología', nos ofrece algunas señales de alerta para saber si estamos 'tecnoestresados' de la mano de la asesoría Tech Sales.

¿Tienes el móvil siempre cerca?

Es la señal más clara de que estamos realmente enganchados al móvil. Si no sueltas el teléfono en todo el día y lo tienes muy cerca mientras duermes, ello genera estrés en nuestra persona y termina por producir "una sensación de desasosiego" que nos impulsa a correr a buscarlo cuando no lo tenemos cerca. Es el móvil como extensión del cuerpo y es una primera señal de alerta que nos tendría que poner en guardia, señala la experta.

¿Lo miras compulsivamente?

¿Puedes pasar más de 20 minutos sin mirar el móvil? Deberías hacerte esta pregunta. Muchas veces no nos damos cuenta, pero literalmente miramos el móvil constantemente, cada muy poco tiempo. Comprobamos si tenemos mensajes, si alguien nos ha dado 'me gusta', o simplemente por pasar el rato. Según Paoli, esto lo hacemos incluso sin recibir ninguna notificación y constituye una clara señal de que estamos enganchados.

¿Tienes 'miedo' a perderte algo?

El FOMO, según describe la autora, es el hecho de sentir la urgencia de tener que mirar el móvil por miedo a perderse algo. Puede ser tanto perder una conversación como estar al tanto de la actualidad informativa, o la última publicación de redes de alguien a quien seguimos.

¿Tu familia y amigos se quejan?

Si eres un adepto a la tecnología y estás todo el día con el móvil o el ordenador en la mano, es muy posible que tu familia y amigos te hayan dado algún toque de atención. Perdemos la atención constantemente, quedamos con alguien y miramos más el móvil que los ojos del que tenemos enfrente... Estos toques de atención son claros avisos de que estamos 'tecnoestresados' y debemos darnos un respiro.

¿No tienes tiempo para tus hobbys?

hobbysAntes leías, ibas a hacer deporte, a pescar, escribías... Ahora 'ya no tienes tiempo'. ¡Error! Nuestras aficiones es de lo más preciado que tenemos y debemos seguir cultivándolas. El uso prolongado y abusivo del móvil nos hace pensar que nuestro tiempo es menor, que ya no nos da la vida para trabajar y cultivar nuestros hobbys. Y, por supuesto, también es una alerta a tener en cuenta.

¿Tener el móvil apagado te genera ansiedad?

A muchas personas les genera una terrible ansiedad, intranquilidad y nerviosismo el hecho de tener apagado el móvil. Sienten que se pierden cosas, conversaciones, informaciones. Si lo tienes siempre encendido, quizá deberías pensar en apagarlo de vez en cuando para darle a tu cabeza y dedos un merecido respiro.

¿Te molesta no tener conexión o batería?

Si te afecta negativamente el hecho de no tener una buena conexión, de que se te acabe la batería o que tu señal de datos sea baja... Es una señal más de que quizás estés 'tecnoestresado' y que debes darte un descanso de las tecnologías.

¿Contestas muy rápido?

Las personas que sufren 'tecnoestrés' suelen contestar cualquier notificación al momento. De cualquier índole: tanto comentarios en redes sociales como Facebook o Twitter hasta correos electrónicos o mensajes de Whatsapp. Sentir esta necesidad es una prueba más de la adicción a las tecnologías y también de esta nueva forma de estrés que venimos experimentando con internet.

Paoli argumenta que una respuesta positiva a la mayoría de estas preguntas es signo inequívoco de que estamos haciendo un mal uso de los dispositivos. A la larga esto nos puede llegar a producir rechazo hacia el mundo de internet y las tecnologías. Por ello, quizá haya que poner en práctica la desconexión digital después del trabajo. Al menos, durante unas horas.