La bolsa de goodies o regalos que han recibido los asistentes a la gala de los premios Oscar contenía este año un producto nuevo: una crema elaborada con aceite de cannabis. Este obsequio habría sido inimaginable en otro momento, no en este: la cultura del cannabis y sus beneficios cosméticos ya es una realidad. El aceite de semilla de cannabis ha logrado innovar las rutinas de belleza, desde limpiadoras, hidratantes, serums, crema de cara de cuerpo, geles de baño o incluso perfumes.

Estos productos no contienen THC (tetrahidrocannabinol), la sustancia química de la planta que produce efectos psicoactivos. Ninguno de ellos puede producir reacciones relacionadas con la inhalación del cannabis. Son, por tanto, absolutamente legales.

El cannabinoide CBD o cannabidiol es el principal componente de la planta. Contiene el 40% de sus principios activos y es ahora mismo uno de los ingredientes más cotizados de la cosmética. ¿Por qué? Se absorbe muy bien por la piel y no deja sensación de grasa, algo muy valorado por los consumidores. Los estudios también han demostrado que el aceite de semilla de cannabis sativa estimula la producción de aceite de la piel.

Una de las marcas pioneras en incluir cannabis en sus tratamientos tópicos es la firma de cosmética natural The Body Shop Desde 1992 tiene en el mercado ‘Hemp’ ('caña' en inglés), una gama de productos con aceites, cremas y bálsamos creados con aceite de cáñamo.

“En mis 24 años en la industria cosmética, hay ingredientes excepcionales que son excepcionales por su rendimiento y eficacia. El cáñamo es uno de ellos” explica Anita Roddick, la fundadora de The Body Shop en la página web de la compañía. Roddick comprendió hace más de 30 años que la opinión pública estaba desinformada y que la mala reputación del cáñamo era infundada.

Pero la decisión de producir cosméticos con aceite de cáñamo no fue fácil. Con la salida de los primeros productos de la línea ‘Hemp’, a mediados de los 90, se produjeron manifestaciones de activistas antidrogas e indignación entre políticos y la prensa internacional. La policía confiscó productos en algunas tiendas y las autoridades estadounidenses pidieron retirar la palabra “cáñamo” de todos los envases. La línea fue prohibida temporalmente en Francia, un momento que The Body Shop aprovechó para publicitarse en ‘Libération’ con el siguiente texto: “Detengan a la piel seca (no a nuestros vendedores)”. Es lo que tiene adelantarse a los tiempos.

Los narices más audaces han visto en el aceite de semilla de cáñamo la oportunidad de innovar en un mercado dominado por los olores tradicionales, básicamente los florales, en el caso femenino, y los amaderados, entre los masculinos. El cannabis es un olor que recuerda a los años hippies, a John Lennon y Yoko Ono, a Woodstock y a toda la energía de los 70, atractivos más que suficientes para que 19-69, la casa de cosmética sueca especializada en perfumes unisex, haya creado ‘Purple Haze’, un tributo a la creatividad, libertad y pereza de aquellos años. Profundo, poderoso, original y cautivador, al perfume de cannabis se añaden acordes de violeta y pachuli, el otro aroma indispensable de la bohemia.

La firma valenciana Babaria es la única española que dispone de un producto con aceite de semilla de cáñamo. Se trata de una crema corporal con una textura innovadora que, en contacto con la piel, se funde para conseguir que el producto se distribuya y absorba fácilmente. Además del derivado del cáñamo, la crema incluye en su composición manteca de moringa, un árbol de India conocido como ‘el elixir de la eterna juventud’, y vitamina E, también asociada con el bienestar y la juventud de la piel.

Babaria también ha creado recientemente Canister Cannabis, una gama de tres productos específicos para manos, rostro y cuerpo. Todos ellos están formulados a partir del aceite de semilla de cannabis y son ricos en omega 3 y 6, vitaminas, aminoácidos y antioxidantes. Los tres productos están testados dermatológicamente, son aptos para pieles sensibles, y prometen dejar la piel hidratada y suave.

El aceite de semilla de cáñamo se considera un ingrediente muy nutritivo e un hidratante intenso para proporcionar un alivio eficaz cuando se siente la tirante y seca por el frío. Aplicado en forma de mascarilla facial, sus efectos hidratantes poder durar tres días. Además, ayuda a restaurar la barrera cutánea y retener la hidratación.

Además, el aceite de cannabis posee otras propiedades:

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