La alopecia es un problema que afecta a más personas de las que parece y a ambos sexos por igual. Sí, la caída del pelo es cosa de hombres y de mujeres. A pesar de ser un tema tabú, evitar la calvicie o un pelo débil y pobre está entre los objetivos de quieres padecen alopecia. Más allá del trasplante capilar existen otras técnicas para reforzar el pelo. Entre ellas está la mesoterapia capilar, un tratamiento sencillo y que parece eficaz para el mantenimiento del cabello.

La mesoterapia es una técnica sencilla a través de microinyecciones en las que se aplica directamente sobre el cuero cabelludo un preparado que lo que hace es favorecer el engrosamiento folicular, haciendo que la producción del cabello aumente en volumen y en calidad y resistencia, volviéndose más fuerte. Este procedimiento no suele llevar ninguna preparación ni cuidado previo y es prácticamente indoloro, sin dejar ningún tipo de marca gracias a que las agujas que se utilizan son muy finas. Además, tras el tratamiento no hay periodo de convalecencia, pues el paciente puede continuar con su vida normal sin ningún tipo de restricción.

Una de las grandes ventajas de este tratamiento para el fortalecimiento capilar es que es rápido, pues cada sesión no suele durar más de media hora, y sencillo de aplicar. Por su parte, aunque esto siempre debe valorarlo previamente el especialistas que está tratando al paciente, suele ser compatible para su uso combinado con algún otro tratamiento que ayude a reforzar el resultado final.

Para tener una mesoterapia capilar correcta, el diagnóstico previo es esencial para inyectar los medicamentos idóneos en cada caso dependiendo de los factores que hayan desencadenado la caída del pelo. Por eso mismo, para llevar el tratamiento más óptimo se debe hacer un análisis del historial médico del paciente y en ocasiones también sobre los antecedentes familiares. Un análisis de sangre también suele ser imprescindible para corroborar si existe alguna patología relacionada con la caída o la debilidad del pelo. Por su parte, el cabello también se analiza, desde su grosor y densidad, hasta la extensión que puede tener la alopecia o una biopsia del cuero cabelludo.

La duración del tratamiento suele ser una de las grandes preguntas, pero es un dato que no se puede llegar a estipular de forma concreta al depender siempre del diagnóstico y evolución de cada paciente. Esto será lo que determine el número de sesiones que se deben realizar o cuánto tiempo debe pasar entre las sesiones de mesoterapia capilar. Por lo general las sesiones suelen ser entre tres y seis meses. Lo mismo ocurre con los resultados. Todo depende de en qué estado esté el cabello o la patología o circunstancia que haya desencadenado la alopecia.

Una de las grandes incógnitas es saber si realmente la mesoterapia capilar es compatible después de haberte realizado un trasplante capilar. Lo cierto es que suele ser aconsejable por una razón, porque hace que el pelo nuevo crezca más fuerte al fortalecer las fibras capilares. Eso sí, este tratamiento no hará que se consiga el crecimiento de nuevos pelos, solo fortalecerá y mejorará el cabello que ha sido injertado.

La mesoterapia capilar es una técnica que se puede utilizar en prácticamente cualquier persona, sea hombre o mujer, que desee fortalecer su cabello. Tras un estudio previo, el especialista determinará cuál es el mejor tratamiento para inyectar en el cuero cabelludo y conseguir un cabello mucho más fuerte, resistente y que favorece su crecimiento.

Este tratamiento parece que será toda una revolución para las personas que padecen alopecia y desean un pelo con más fortaleza y resistencia. Además de ser compatible con otros tratamientos, es una gran complemento tras el trasplante capilar para ayudar a ese pelo nuevo a crecer de forma sana. Es indoloro, rápido y no deja ninguna marca, por lo que es un procedimiento ideal para tratar las pérdidas de cabello.