Demetria Gene Guynes, Demi Moore para el gran público, no es una estrella convencional. Pudo cultivar hasta la extenuación la imagen de novia y dama de América ganada con peliculones como 'Ghost' o 'Una proposición indecente'. Pero prefirió hacer menos películas como actriz, ejercer más como productora y vivir la vida que quería. Eso incluyó su divorcio de Bruce Willis, al que, según declaró hace años, regaló "tres partos naturales", y su matrimonio con Ashton Kutchner, con el que le separaban 16 años de diferencia. Hoy, Kutchner está casado con Mila Kunis ('Cisne negro'), pero sigue manteniendo relación con las hijas de su exmujer. Lógico: comparten generación. Moore no tiene pareja conocida, solo se sabe que ha pasado la cuarentena con Scout, Runner, Tallulah y el propio Willis como una familia feliz, pese a que llevan separados 20 años. Para tener la foto completa, el protagonista de 'Luz de luna' y 'La jungla de cristal' está hoy casado con la joven modelo Emma Heming, quien guarda un evidente parecido con su exmujer. Sí, todo este enjambre familiar parece un lío (y probablemente lo es).

En esta ocasión Demi Moore no salta a los medios por un nuevo proyecto o el envidiable aspecto y energía que mantiene a sus 57 años. Su cuenta de IG ha dejado estupefactos a sus seguidores por el escenario de su última publicación: el baño. La estancia tiene lo propio de cualquier baño y varios elementos disruptores: un sofá de estampado vintage, una moqueta de pelo largo y una figura tamaño natural de Juana de Arco. Al fondo, el inodoro con la tapa levantada y en la otra instantánea, la bañera jacuzzi casi pegada a la moqueta. Y entre ambos espacios, la actriz grabando la promoción de 'Dirty Diana', podcast erótico que estrenará el próximo 13 de julio y que toma el nombre de una famosa canción de Michael Jackson.

Pese a la inminencia de este estreno, lo que más ha llamado la atención de los followers no es nada relacionado con el podcast, sino que la actriz haya elegido este tipo de decoración y materiales para su baño. Los comentarios no se han hecho esperar:

Al margen de gustos, el baño de Moore está lleno de errores higiénicos. Su estilo decorativo no es el más acertado para el lugar de la casa que probablemente exige mayor limpieza. Más aún en tiempos de coronavirus. Dejar sin bajar la tapa del inodoro es un grave error, ya que los aerosoles que se desprenden con cada descarga de la cadena y el hecho de que esté sin cerrar hace que gérmenes y microorganismos campen a sus anchas.

La moqueta, especialmente las de pelo largo, son otro reservorio de todo tipo patógenos. Incluso aunque se limpie con aspiradora todos los días, este tipo de textiles, como las alfombras, son elementos a los que hay que prestar atención. Entre sus fibras se acumula suciedad, polen, bacterias, virus y alérgenos que pueden causar alergias y enfermedades. La humedad, además, favorece el crecimiento de estos microorganismos, además de producir malos olores. Hay, en defintiva, razones sufcientes para cambiar de decoración. O como ya le ha dicho a Moore uno de sus seguidores: "Te quiero, pero necesitas renovar ese baño".