Avión, barco, bus, coche, tren… Las formas que existen para viajar son muchas, siendo siempre una más cómoda que otra dependiendo del destino, claro está. Siempre hay épocas en las que es más recurrente viajar, como el verano, la Semana Santa o cuando consigues cuadrar unos días de vacaciones con el resto de los miembros de la familia o tus amigos, cosa que cuando llega la jubilación no tienes que hacer porque, al fin, tienes mucho más tiempo libre. Es entonces cuando puedes aprovechar para hacer esos viajes espaciales que siempre has soñado pero que por una cosa u otra no has podido, y si estás pensando en buscar uno de ellos… ¿qué tal el viaje en tren más largo del mundo?

Si eres de los recurrentemente tiene que coger un tren y a veces el trayecto se le hace eterno prepárate, porque puede subirte a un tren en el sur de Portugal y bajarte días después en Singapur. Días y días de aventuras en los que se transita por España, Francia, Rusia, China, Tailandia o Malasia. ¿En total? Casi 19.000 kilómetros recorridos para ir de una punta de Europa al otro extremo de Asia.

El tren eso sí, no es el mismo, como es obvio. Cada cierto tiempo será necesario cambiar de tren o de estación, además que, con la situación actual de la pandemia y debido al largo recorrido no es sencillo realizarlo ahora mismo según la situación sanitaria de cada país y los papeles que pidan para entrar en su territorio, ya que hablamos de más de una decena de países comprendidos entre dos continentes. Lo que viene a ser recorrerse medio mundo en menos de un mes.

Todo empieza, como decíamos, en pleno Algarve, saliendo de Lagos hasta Coimbra, donde se cogerá otro tren que recorrerá parte de Portugal y atravesará España hasta la localidad francesa de Hendaya. Desde ahí, la nueva ruta tendrá como destino París, desde donde saldrá rumbo a Moscú recorriendo países del centro de Europa como Alemania o Polonia.

A partir de ahí llega el recorrido más largo de todos para transitar por toda Rusia y parte de Mongolia con destino Pekín. Una vez allí queda aún un largo camino hacia el sur por toda China, Laos y Tailandia haciendo diferentes trasbordos hasta llegar a Malasia, la última parada de nuestros vagones antes de llegar al destino final: Singapur, donde se habrá completado el viaje en tren más largo del mundo.

Por supuesto hay otras rutas para llegar al destino sin tener que llevar esta a rajatabla, pero requiere tiempo, dinero y planificación. No obstante, el viaje en tren recorre dos continentes y más de 10 países, por lo que es una oportunidad única para conocer un poco más de cada cultura que se nos cuela en los vagones por cada una de las regiones por las que se pasa. Cultura, gastronomía y una experiencia inolvidable para poder dar la vuelta, al menos, a medio mundo. ¿Ya estás preparando la maleta?