Es la odisea de cualquiera que esté preparando sus vacaciones. Desde comienzos de este verano ya se venía fraguando como conseguir un coche de alquiler, especialmente en Canarias y Baleares. Y así está siendo. O no hay disponibilidad o los pocos que hay han subido su precio como la espuma en unas islas en las que, si de verdad quieres conocerlas, el coche es un imprescindible para poder recorrerlas. Pero, ¿cómo es posible que con menor volumen de turismo que en la etapa prepandémica los 'rent a car' estén a tal nivel de saturación?

La pandemia ha hecho estragos en las compañías de alquiler de coches, por lo que prácticamente la totalidad de las empresas dedicadas al sector vendieron parte de su flota para aguantar durante el tiempo en el que no entraban reservas a la vez que los fabricantes de vehículos han reducido su producción. Ahora, con el sector turístico despuntando de nuevo el drama del visitante es que tiene hotel o apartamento, pero conseguir un coche de alquiler

Roberto Dávila, secretario general de la Asociación de Empresas Canarias de Alquiler de Vehículos (AECAV) comentaba al diario Canarias7 que un coche parado tiene un coste para las empresas de 250 euros mensuales. Por eso mismo, pese a que se han incorporado vehículos a las flotas y se espera seguir haciéndolo, una vez llegue septiembre y comience la temporada de otoño e invierno vuelve la incertidumbre para los 'rent a car', que no quieren arriesgarse a aumentar su flota ahora para finalmente tener pérdidas ante una nueva caída del turismo.

Javier Fernández gestiona casas vacacionales en Lanzarote y ya ha tenido varios casos de huéspedes que se han encontrado con el problema. Primero fue una pareja que viajaba desde la península para pasar una semana en la isla que solo consiguió alquilar un coche, a un precio estratosférico, durante cuatro de los siete días que iban a estar en la isla, por lo que les recomendó "aprovechar esas jornadas para recorrer los puntos clave y dejar para los días en los que no tenían coche los lugares a los que era más sencillo llegar con transporte público", nos aclara. "Me comentaron que les fue imposible conseguir un coche para todas las vacaciones, ni siquiera con una nueva reserva o en una compañía diferente", dice sobre la pareja.

Por su parte, otro de los casos que se ha encontrado es el de una familia de Gran Canaria que ante el problema de conseguir un coche de alquiler, y si lograban ver uno disponible el precio se iba del presupuesto, decidieron cambiar el avión por el barco y hacer un viaje algo más largo pero con la seguridad de llevar su propio vehículo y asegurarse la movilidad por la isla. "Viajar en barco para llevarse su propio coche es una de las alternativas que ha surgido para los viajes entre islas ante la baja oferta", nos comenta Javier.

Hace solo dos años en las Islas Canarias había en torno a 70.000 y 80.000 coches de alquiler disponibles para la cantidad de turismo que llegaba durante todo el año al archipiélago, ahora la flota está alrededor de los 25.000 vehículos. En el caso de Baleares, en un verano sin pandemia podían haber más de 100.000 coches disponibles, cifra que ahora, según la Agrupación Empresarial de Alquiler de Vehículos con y sin Conductor de Baleares (AEVAB), no se acerca a los 60.000.

Más demanda, menos oferta, precio al alza. Así se podría definir la situación actual del sector del 'rent a car' en Baleares y Canarias. Si previo a la pandemia un coche normal con todas las comodidades salía a un precio asequible, alquilar un coche ahora durante una semana es raro que baje de los 1.000 euros pudiendo llegar a costar en la mayoría de casos más que el propio alojamiento. Según Bloomberg, las tarifas de alquiler se han encarecido un 140% de media, llegando a elevarse el precio hasta un 230% más en semanas de gran afluencia en islas como Mallorca

Los que han conseguido un coche para pasar sus vacaciones tampoco se libran de la incertidumbre. Es el caso de Abelardo, que viaja en las próximas semanas a Canarias junto a un grupo de amigos y, pese a que hace un tiempo logró reservar alojamiento y coche a un precio medianamente razonable, están alerta de una posible cancelación, "somos conscientes de la demanda y nos preocupa la reserva porque no se hace el cobro hasta la llegada y nos da miedo llegar y no poder movernos". Esta incertidumbre del grupo de amigos llega porque muchos han conseguido reservar su coche para las próximas vacaciones en alguna de las islas, pero en lugar de recibir el mail de confirmación llegaba uno que lo anulaba.

Así, algunas personas residentes han llegado a ofrecer sus propios vehículos particulares a los turistas, una demanda que ha llegado a oídos de los más desesperados. Tal y como relata Pablo Dévora, un afectado más por la alta demanda a Diario de Avisos, al consultar a los particulares estos le comunicaron que ya habían alquilado sus vehículos para esas fechas, llegando a plantearse la cancelación definitiva de su viaje.