Las ciudades son, sin duda alguna, núcleos de población magníficos que nos ofrecen un sin fin de beneficios y oportunidades. Pero en caso de tener que ponerles un inconveniente, podría decirse que las ciudades nos “alejan” de la naturaleza. Entre tanta calle, edificio y coche se nos olvida que más allá de la ciudad hay un entorno espectacular. Por eso mismo existen los parques, unos más pequeños y otros más grandes, pero desde luego lugares que nos acercan más a la naturaleza, donde salir a pasear, a desconectar, a hacer deporte o a jugar con tus hijos o nietos. Lo cierto es que España cuanta con parques espectaculares para relajarte y olvidarte que están en mitad de la ciudad. Te enseñamos algunos de ellos, ¿los conocías todos?

Si hay que hablar de uno de los grandes parques españoles desde luego que en primera posición y el primero que viene a la mente de la mayoría es el céntrico parque de El Retiro de Madrid. Turistas y madrileños se reúnen cada día para recorrer el parque que se encuentra en la ciudad con casi 120 hectáreas. Un lugar imprescindible de Madrid donde perderse para encontrar algunos de sus secretos, como su espléndido Palacio de Cristal o el Palacio de Velázquez, dar un paseo en barca por su gigantesco estanque, o contemplar la escondida Casita del Pescador.

De la capital nos vamos al sur, al que se podría decir que es el parque más famoso de todo Sevilla y uno de los más bonitos de España que se inauguró en 1914. A día de hoy le pertenece también la Plaza de España y la Plaza de América, que son sus límites por el norte y por el sur respectivamente. Encontrar paz y tranquilidad en Sevilla es fácil si te pierdes por sus caminos y vas encontrando lugares tan mágicos como la isleta de los Patos o los Pájaros.

Y del sur al norte para irnos hasta Santander, donde está el Parque de la Magdalena, una zona que cualquier turista de la ciudad habrá visitado en alguna ocasión. Se encuentra en la Península de la Magdalena, donde está uno de los monumentos más representativos de la ciudad, el Palacio de la Magdalena. Y lo mejor es que podrás disfrutar de la naturaleza en todas sus formas, ya que por una parte están las zonas verdes, el Parque Marino de la Magdalena y también la playa, así que nada mejor que un chapuzón en el mar, si el tiempo acompaña en ese norte tan inestable, por su puesto.

Es el turno del Mediterráneo, en Valencia, donde se encuentran estos jardines que componen el parque urbano más extenso de España al recorrer prácticamente toda la ciudad a lo largo del antiguo cauce del río Turia hasta desembocar en el puerto. Quizá una de las actividades más famosas al recorrer estas zonas ajardinadas sea ir admirando la cantidad de puentes que puedes encontrarte por el camino, algunos de ellos diseñados por el arquitecto Santiago Calatrava.

Seguimos en el Mediterráneo pero más al norte, en la costa catalana para admirar estos impresionantes jardines, considerados uno de los mejores de toda la costa mediterránea. Es curioso que esté sobre un acantilado, por lo que tiene bastante desnivel, aunque eso ofrece unas vistas espectaculares que podrías contemplar durante todo el día. Un lugar tranquilo rodeado de naturaleza en donde no te apetecerá otra cosa que no sea sentarte a leer tu libro favorito mientras observas todo el encanto del jardín.

De un extremo de España al otro para visitar el Parque de la Alameda en Santiago de Compostela, uno de los lugares con más encanto de la ciudad que, a pesar de no ser muy grande, es un lugar ideal para la desconexión y el descanso alejado del murmullo de la ciudad. Y por supuesto, uno de sus mayores encantos son sus vistas privilegiadas sobre la catedral a la que cada día llegan cientos de peregrinos, una fotografía que se te quedará guardada en la memoria.

Y acabamos este paseo por los parques urbanos españoles en Barcelona, en este céntrico parque que actúa como pulmón de la ciudad donde además se encuentra la sede del Parlamento catalán y el zoo de la ciudad. Aún así, su lugar más fotografiado es la cascada que se encuentra en uno de los extremos norte del parque, además de su lago central y la curiosa figura de un mamut que se encuentra entre la vegetación del parque.