El confinamiento del año pasado, la pandemia o tener que adaptarnos a un nuevo estilo de vida con distancia social y el uso de mascarillas nos ha llevado a plantearnos hacer algunos cambios en nuestro día a día e incluso en nuestro hogar para adaptarlo a pasar más tiempo ahí. También probablemente en el coche, unos preferirán no comprarse uno nuevo por hacer menos salidas y otros, en cambio, han visto el momento oportuno ahora para así depender menos del transporte público y de las aglomeraciones. Y, en efecto, es el momento ideal para comprarse un coche si quieres que te salga algo más barato de lo habitual.

Desde mediados de julio el Congreso y el Senado aprobaron una medida y posteriormente fue publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE), una norma que indica una bajada del impuesto de matriculación hasta final de año. Esto tiene su parte buena y su parte mala. En lo que resta de año el impuesto de matriculación para nuevos vehículos será mucho más barato, pero es una norma que tan solo estará vigente hasta el 31 de diciembre de 2021 y en 2022 el precio volverá a subir. Por eso mismo, para el que se plantee la compra de un coche nuevo es el momento ideal, ya que dependiendo del caso, se puede llegar a ahorrar hasta 1.800 euros de media.

Así, cambian los tramos del impuesto al haber un cambio del ciclo, que ha pasado de NEDC al WLTP, la nueva normativa sobre la homologación de emisiones y su consumo, más realista y que afecta ahora a gran parte del mercado automovilístico haciendo que muchos de esos vehículos se beneficien de la reducción del impuesto de matriculación.

De esta manera, se establecen los nuevos cuatro tramos sobre la emisiones, antes más estrictos, que indican la cantidad que se debe pagar por el impuesto de matriculación:

Dependiendo de cada modelo de coche la bajada será una u otra, pero para los que se beneficiarán la rebaja mínima estará sobre los 400 euros, mientras que algunos podrán llegar a conseguir hasta 6.000 euros de descuento, esto en casos puntuales, claro está. Así, por ejemplo, un coche que tenga emisiones de CO2 de 130 gramos/kilómetro y que costase 18.000 euros se ahorrará casi 700 euros, pues ahora habría que desembolsarse 17.320 euros en total.

Ahora bien, no para todos es una alegría aventurarse a comprarse un coche nuevo, pues la medida no tiene carácter retroactivo, es decir, para aquellas compras que se hayan fraguado previamente al 12 de julio no se le aplicará la modificación, por lo que el precio final de su coche será el que era hasta el momento y no se podrá reclamar la diferencia.