Abordamos aquí un clásico de cada verano: ¿Puedo conducir sin camiseta? ¿Me multan si me pillan? Está claro que no todos los climatizadores ni los aires acondicionados son espectaculares y refrescan en segundos. La tentación de llegar al coche tras un día de playa y no ponerse la camiseta para conducir es, reconozcámoslo, muy poderosa. En fin. Venga, a ver si de una vez por todas aclaramos todo y evitamos tener que pasar por caja al final del verano por culpa de unos pequeños detalles. ¿Se puede conducir sin camiseta? ¡Arrancamos!

Si somos correctos y respetuosos con las palabras, poder, se puede conducir sin camiseta. Ahora bien, ¿nos pueden multar por ello? La respuesta, en efecto, también es afirmativa: podemos ganarnos una multa de 100 euros por conducir sin camiseta. Al menos, puede verse reducida a la mitad por pronto pago y no te van a quitar puntos del carnet. Pero no serás el primero en recibir la sanción, que quede claro.

¿La razón? Hace semanas hablábamos de cosas parecidas, cuando sacamos a la palestra la posibilidad de ganarnos una multa si conducimos en chanclas. La idea es la misma. Si conducir sin camiseta nos condiciona la libertad de movimientos o afectar a la seguridad en la conducción… nos puede caer una sanción. Al igual que en el tema que ya tratamos, aquí la interpretación del agente de turno es clave, porque para lo que uno puede ser perfectamente legal, para otro puede ser que limite movimientos o que el piense que el sudor y la tapicería de cuero te van a traer problemas en algún momento y perder la atención de la carretera y la conducción.

Recordamos, para que quede claro, que el Reglamento General de Circulación no contempla una ley específica que prohíba directamente conducir sin camiseta, pero son varios los artículos que hacen referencia al atuendo, la libertad de movimientos y la correcta atención a la conducción en la vía por la que circulemos. De nuevo recordamos aquí los artículos 17.1 y 18.1, ya mencionados en el reportaje anterior donde decíamos que nos pueden multar por conducir con chancletas, y añadimos el 3.1, en el que se dice que “no usar camiseta podría producir heridas en caso de activarse el cinturón de seguridad”.

Llegados a este punto, no está de más recordar que, buscando “conducir fresquito”, no podemos hacer lo que nos dé la gana. Sacar el codo por la ventanilla nos puede costar lo mismo que conducir sin camiseta. Si el copiloto decide sacar los pies por la ventanilla recostándose en el asiento, más de lo mismo, incluso aquí la sanción puede ser mayor en función del peligro de la situación. Sacar el cuerpo o sólo la cabeza por el techo solar en movimiento… más de lo mismo. Ni se te ocurra circular con el portón trasero abierto para que “circule” el aire. Aparte de ser algo de locos aquí sí que te puede caer un buen puro.

Es que, incluso, si el conductor se enrosca una toalla en el bañador mojado y se pone a conducir, con camiseta y el cinturón puesto, te pueden multar si se estima que en caso de frenazo puede darse el efecto submarino, resbalando por debajo del cinturón y pudiendo sufrir daños físicos más que considerables.

¿Comer un helado? ¿Beber agua fría o un refresco? Tampoco. El conductor no puede comer ni beber cuando está al volante. La explicación cae por su propio peso: si todos los sentidos no están en plena atención a la conducción, la realización de estas actividades es una infracción que conlleva sanción. Sí lo puedes hacer con el coche estacionado, no vale hacerlo en un semáforo en rojo, por ejemplo, o en un atasco. Ojo que la multa, aunque sea leve, asciende a 100 euros.

En definitiva… si hace mucho calor y no quieres sufrir al volante… no cojas el coche. Así de fácil. De lo contrario, las vacaciones te podrán salir un poco más caras de lo que habías planeado, amén de ponerte en peligro de manera imprudente.