El Seat 600 marcó una época. Familias enteras se apretujaban dentro del coche para ir de vacaciones o a pasar el día en el campo y, posiblemente, a ti también te tocó vivir alguno de aquellos momentos junto con hermanos, abuelos, primos… Sin embargo, con el paso del tiempo, el buque insignia de SEAT quedó en el ostracismo para el público general y poco a poco se convirtió en una pieza casi de coleccionista. Según datos de la DGT que recogía el Diario Vasco en 2015, habría unos 127.000 ejemplares en España.

Ahora, dos de los coches que marcaron a toda una generación han servido para que 12 alumnos de la asignatura Tecnología Industrial del Colegio San Patricio, en Madrid, hayan hecho sus prácticas con ellos. El ejercicio, convertirlos en dos modernos vehículos eléctricos plenamente autónomos y funcionales.

El impulsor de este salto intergeneracional ha sido el profesor de la asignatura, Manuel Amor. "Los más sorprendidos han sido los abuelos de los alumnos, que han visto un coche de su época revivido con la última tecnología", dice. Los alumnos, de 18 años, no daban crédito con la historia del SEAT 600: "la desconocían y les llamaba la atención que una familia pudiera viajar allí dentro".

Para llevar a cabo la transformación del SEAT 600 de gasolina en uno eléctrico, los alumnos tuvieron que invertir 150 horas de trabajo e incorporar 10 piezas nuevas tanto en la zona del motor como en el interior del vehículo.

"El 600 era perfecto porque al pesar poco se necesita menos batería y un motor más pequeño”, comenta el profesor. Además, la mayoría de los materiales que han utilizado han sido reciclados de otros proyectos o creados ad-hoc para este. "Gracias a la reutilización, la reparación y el reciclaje de piezas y materiales, el proyecto es un ejemplo de economía circular", afirma Amor.

En el exterior del 600, los cambios más visibles han sido la instalación de un panel solar en el techo del vehículo, así como la sustitución de los faros originales por otros con menos consumo energético y más adaptado a la energía eléctrica.

En el interior, la incorporación más importante ha sido una pantalla táctil con la que controlar las luces, ver el consumo y la duración de la batería, entre otros aspectos. Además, en el maletero, situado en la parte delantera del vehículo, se ha añadido una gran batería que se va recargando con la energía solar que recoge el panel de la parte superior.

Las ventas del SEAT 600 batieron todos los récords de la época. Durante los 16 años que estuvo en producción (1957-1973) se vendieron 794.406 unidades a un precio medio de 65.000 pesetas, lo que hoy en día serían unos 390 euros, comercializándose en varios modelos, como el 600, 600D, 600E, 600L, 800, 600 Comercial y 600 Descapotable.