Con la llegada del buen tiempo, que parece que este año se está haciendo de rogar, llegan las ganas de salir a hacer deporte al aire libre. Una buena oportunidad de ponernos en forma una vez que dejemos de lado las lluvias y el frío. Sin embargo, iniciarse en la práctica deportiva a partir de cierta edad puede provocar lesiones, siendo las articulaciones las zonas que más sufren. Con la ayuda de los expertos de Procare Health, os damos una serie de pautas a tener en cuenta antes de ponernos en marcha.

No intentes correr antes de andar. Al principio, lo habitual es sentirse presionado por poder hacer ejercicio de manera diaria. Esto puede producir molestias por el sobresfuerzo realizado y, en conclusión, desencadenar una frustración que lleve a dejar por completo la actividad. Lo recomendable es adaptarlo teniendo en cuenta factores como la condición física previa, estado de salud actual, edad y objetivos a conseguir.

Además del propio compromiso adquirido de llevar a cabo esta rutina, visualizarlo de forma ordenada a lo largo de las semanas, nos ayudará a tener una visión mucho más clara de nuestros objetivos y de cómo lograrlos sin poner en riesgo nuestra salud física. Ser organizados nos dará las pautas necesarias para no saturar la musculatura y las articulaciones.

Los expertos de Procare Health señalan la importancia de una buena hidratación antes, durante y después de la actividad física. No solo porque puedan derivar en problemas como bajadas de tensión y mareos, sino porque debemos mantener el rendimiento de los músculos y las articulaciones bien lubricadas evitando así, molestias innecesarias.

No llevar a cabo un calentamiento previo a la actividad física que active nuestros músculos y articulaciones, puede ocasionar una serie de molestias o lesiones. Calentar de una forma correcta y consciente nos permitirá soportar la intensidad del trabajo físico que realizaremos después.

Una mala elección del calzado para hacer deporte puede desencadenar en dolor no solo en el propio pie sino en otras partes del cuerpo como rodillas, tobillos o caderas. Adaptar las zapatillas al tipo de deporte o actividad a realizar o a la superficie donde vamos a desarrollarlo nos ayudará a sentirnos cómodos, y será clave para que nuestra rutina deportiva acabe en victoria.

Sea cual sea la disciplina elegida, es importante conocer la técnica para no sufrir lesiones que nos llevarán a tener que parar la actividad durante un periodo de tiempo. Una buena postura, el correcto uso de los elementos utilizados y poner en práctica consejos de profesionales del sector nos ayudarán a hacer deporte de una manera adecuada sin poner en riesgo nuestra salud física. Busca ayuda profesional antes de hacer una locura.

Ocurre que, en muchas ocasiones, el gran impedimento para disfrutar de una buena rutina deportiva es el dolor articular, con lo que contar con suplementos antinflamatorios naturales como la cúrcuma, puede ayudarte a solucionar de manera efectiva este problema y mejorar tu calidad de vida.