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¿Qué son y cuánto cuestan las mascarillas elastoméricas que los expertos en aerosoles recomiendan?

  • Las mascarillas elastoméricas aún no son conocidas en Europa ni se han recomendado por las autoridades

  • En Estados Unidos se han empezado a popularizar por su efectividad en cuanto a ajuste y filtración

  • Algunos expertos indican que deberíamos empezar a utilizar estas y abandonar las que ya usamos

Las mascarillas siguen siendo, meses después de ser obligatorias, un tema de debate. ¿Cuál es la mejor? ¿De qué forma es más seguro llevarlas? ¿Vale cualquier combinación para usar la doble mascarilla? Estas y muchas otras preguntas nos las hacemos cada día, por ello los expertos no dejan de dar consejos sobre ellas en entrevistas o a través de sus propias redes sociales para llegar al máximo de personas posible. Ahora comienza a sonar un nuevo tipo de mascarilla: las elastoméricas. ¿Están disponibles en España? ¿Por qué las están aconsejando los expertos?

Uno de los principales problemas que existen actualmente con el uso de las mascarillas es el ajuste de estas. Por mucho que tengan un buen filtro que nos proteja del virus, si dejamos huecos por llevarla mal ajustada va a entrar y salir parte de aire sin filtrar, que es precisamente lo que hay que evitar a toda costa. Ahora, el catedrático de la Universidad de Colorado y experto en aerosoles José Luis Jiménez ha comenzado a hablar de las mascarillas elastoméricas que él mismo utiliza y que podrían ser la solución a esos problemas de filtrado y ajuste.

Mejor ajuste, mejor filtración

En una entrevista a Nius, el experto señala que "la idea de las elastoméricas, es que lo que sella es silicona y sella muy bien", por eso mismo él ya las utiliza tras probarla y comprobar su efectividad. Jiménez comenta que el filtro que este tipo de mascarillas lleva es N95 y puede cambiarse, por lo que también son mascarillas reutilizables y, para su gusto, son más cómodas que otras, como las FFP2 o las quirúrgicas.

"Deberíamos adoptar estas ya y abandonar las otras", señala tajante el experto en aerosoles. Pese a lo optimista de su afirmación, reconoce que, aunque hay capacidad para producirlas, es algo complicado porque primero deberían ser los gobiernos los que dieran el visto bueno para comenzar la producción masiva, que también abarataría los costes de fabricación.

Con el apoyo de los gobiernos, la gente las conocería y sería el primer paso para concienciar sobre su uso pues "los problemas con la filtración y el ajuste pasarían a la historia" gracias a su molde de silicona que se adapta a la perfección al rostro. Además, algunos usuarios que las han probado ya han apuntado que también resuelve el problema del empañamiento de gafas.

Su precio, el principal problema

Las mascarillas elastoméricas aún no son conocidas ni en España ni en el resto de Europa, solo en Estados Unidos han comenzado a verse. Su precio ronda entre los 70 y los 79 dólares, unos 65 euros, siendo este el principal hándicap al que se enfrentan. Por el momento, hasta que no se oficialicen y su producción sea masiva, difícilmente bajarán de precio.

Jiménez pone el ejemplo de Don Milton, un científico experto en las transmisiones por el aire que, según el catedrático, está en fase de convencer a Joe Biden para que se fabriquen masivamente y así puedan llegar lo antes posible a la población a un precio mucho más reducido. Ambos expertos utilizan la misma mascarilla elastomérica, la Envomask.

Esta marca de mascarillas elastoméricas es la más popularizada y recomienda cambiar el filtro de sus mascarillas cada 8 horas, en especial si se ha estado expuesto a ambientes sucios o contaminantes que hayan afectado a la calidad del filtro reduciendo su eficacia. Desde su página, además de la mascarilla también se pueden comprar los filtros en diferentes packs, uno con 25 cuesta 57'50 dólares, unos 47 euros.

Por el momento, evita cometer errores

Como en España por el momento ni están ni se las espera, solo queda combatir el virus con las mascarillas indicadas por las autoridades sanitarias, como las quirúrgicas o las FFP2. Uno de los primeros pasos, evitando cruzar los elásticos que X, pues este gesto, muy popular cada vez que salimos a la calle, hace que se creen huecos en los laterales por lo que el aire no se filtra y, por tanto, existe un riesgo mayor de contagio.

La doble mascarilla se puede usar, siempre que no afecte al ajuste. Por ello, lo más indicado es utilizar una FFP2 bien ajustada al rostro con una quirúrgica encima. Eso sí, hay que recordar siempre que no se debe sobrepasar el tiempo de uso indicado para que no pierdan efectividad en filtración, reemplazando la mascarilla usada por una nueva cuando sea necesario. Además, lo más indicado es lavarse las manos antes y después de manipular la mascarilla, siempre por las gomas y guardándola en una bolsa de papel o un porta mascarillas.