Verrugas en el cuello: ¿por qué me han salido y cómo puedo hacerlas desaparecer?

Las verrugas no suelen suponer un problema. Pero sí, en ocasiones, son molestas, sobre todo si aparecen en las manos o en la planta de los pies. Pero cuando de verdad nos preocupan es cuando salen en zonas bastante visibles, que puedan afectar a nuestro aspecto. Por ejemplo, las del cuello. Hay a quien no le importará tenerlas ahí, creen que les da cierto encanto y personalidad, pero habrá otras muchas personas a las que no les hará ninguna gracia que afecten a su apariencia. Estos, seguramente, se preguntarán: “¿Puedo quitarme las verrugas del cuello?”. Por supuesto que sí, puedes volver a tener tu cuello totalmente limpio de verrugas.

Virus del papiloma humano: el desencadenante

Pero primero, ¿sabías que la aparición de verrugas se debe al virus del papiloma humano (VPH)? De primeras puede parecer preocupante, pero muy pocos tipos de VPH son peligrosos, así que puedes estar tranquilo. También debes saber que las verrugas se contagian, por lo que es mejor no estar tocándolas o tocar las de otros, puesto que te estás exponiendo a que aparezcan más.

Hay varios tipos de verrugas, pero las que aparecen en el cuello suelen ser las filiformes. Son alargadas, como las que salen en los párpados o en las axilas, y con un tono como el de la piel o ligeramente más oscuro.

Por suerte, la gran mayoría de verrugas desaparecen con el paso del tiempo ellas solas. Pero, como siempre, hay ocasiones en las que no se van ni con agua caliente. Entonces se te pasa por la cabeza el quitártelas. Lo primero es no pensar en remedios caseros, debes acudir a tu dermatólogo. Él será siempre el que te guíe y recomiende el mejor tratamiento para eliminar esas verrugas del cuello de las que te quieres deshacer.

Métodos para eliminarlas

Cuando esas verrugas del cuello no desaparecen solas y quieres eliminarlas porque no te gusta tu aspecto, tu especialista te dará varias opciones. El principal es el láser, un tratamiento rápido y eficaz para quitar la verruga y que por suerte no suele provocar dolor al aplicarlo. Luego está la crioterapia, en la que se aplica nitrógeno líquido sobre la verruga. Al igual que el láser, es un tratamiento rápido, pero algo más doloroso. Eso sí, ten en cuenta que puede dejar una pequeña cicatriz cuando la verruga desaparezca completamente. Si tienes pensado usar algún producto de farmacia, infórmate primero con el farmacéutico o tu dermatólogo antes de aplicarte nada, puede que no tenga el efecto que deseas.

Recuerda que antes de tomar cualquier decisión debes acudir a tu dermatólogo, puede que aún las verrugas de tu cuello sean muy recientes y no se hayan caído por eso. Lo mejor es no desesperarse, aunque sean antiestéticas no suponen un problema para tu salud, así que no corre prisa su eliminación. Sigue siempre los pasos que te indique tu especialista y no intentes quitarlas en casa con un hilo o con algún otro método que hayas leído por ahí, puede ser doloroso y además dejarte un cicatriz que con los otros tratamientos puedes evitar.