Lluvia de estrellas: Springsteen, Sabina, Vaquerizo... ahora le ha tocado a Miguel Ríos realizar un aterrizaje forzoso en pleno escenario. Memes aparte, las caídas de las celebridades en el escenario son moneda común, sobre todo cuando alcanzan cierta edad. El intérprete de 'Bienvenidos', que tiene ya ochenta años y sigue dándolo todo, se encontraba este fin de semana interpretando el susodicho tema cuando enredose con un cable y fue a dar con toda su rockera humanidad de bruces contra el suelo. Susto, pero lo justo. Porque Ríos se incorporó de inmediato para seguir con el concierto.
Quizá la caída más recordada, por aparatosa y grave, sea la que sufrió Joaquín Sabina en 2020, cuando fue a parar al foso del mismo escenario, el del Wizink, y tuvo que ser llevado al hospital. Otra de las más recientes, la de Mario Vaquerizo en Cáceres, tuvo algunas secuelas de las que el artista afortunadamente se está recuperando. Pero fuera de los escenarios la cosa se pone todavía más seria: solo en 2023, las muertes por caídas fueron la primera causa de defunción sin enfermedad: 4.018 caídas mortales frente a las apenas 700 de 1980.
Precisamente, te contábamos en esta nota que un hábito recomendable es practicar diariamente el ejercicio de bajar hasta al suelo y levantarse no solo aumenta nuestra fuerza, flexibilidad y equilibrio, sino que nos prepara para caídas eventuales. Por otro lado también te contábamos aquí que, según el doble profesional Suart F. Wilson, uno de los 'trucos' más importantes es relajarse al caer. "Existe un riesgo mucho mayor de romperse un hueso con este tipo de presión -señala- y el objetivo es extender el impacto de la caída sobre la mayor parte del cuerpo posible, usando zonas más acolchadas, como los glúteos, los muslos y la parte alta de la espalda".
Otro detalle imprescindible: levantarse con cuidado. Como en el caso de Ríos, muchos artistas (pero en realidad cualquier persona) tienen a 'levantarse rápidamente' por una cuestión de orgullo o ego, pero en ese acto reflejo pueden estar haciéndose más daño. "Si te levantas de inmediato y luego te caes de nuevo porque algo está roto o fuera de lugar, la segunda caída podría ser aún peor", señala Thomas Dupont, otro experto en la materia.
Entre sus concejos más útiles están, para caídas hacia atrás: hundir la barbilla en el pecho para proteger la cabeza, y tratar de usar los glúteos como almohadillas que amortigüen la caída. Y para caídas hacia adelante: un error habitual es protegerse con las manos y brazos pero eso puede llevar a roturas de huesos, lo mejor es intentar caer de costado apoyándose en los muslos y protegiendo siempre la cabeza en el pecho.