Por fin ha llegado la nieve a las estaciones españolas. Las pistas lucen impecables después de una Navidad bajo mínimos y los esquiadores están deseosos de catar todo ese oro blanco caído del cielo. Quien más, quien menos tiene claras sus limitaciones por edad, estado de forma o lesiones pasadas, pero ahora tanto los que están en perfecto estado de revista como los que no lo están tienen una nueva herramienta de la que echar mano para disfrutar de su pasión con menos esfuerzo y, por lo tanto, menos cansancio. Óptimo si tienes alguna lesión de rodilla que te de temor revivir o notas que te cansas mucho a partir de cierta edad.
Alta tecnología al servicio del deporte blanco. Se trata de Xnowers, un exoesqueleto diseñado para la práctica del esquí que permite disfrutar de este deporte durante horas reduciendo notablemente el agotamiento de los músculos. Xnowers ha sido diseñado y desarrollado íntegramente por Levier, una empresa española dedicada al diseño de exoesqueletos deportivos de alta tecnología.
Carlos Fernández, ingeniero y uno de los máximos responsables de Levier, nos explica cómo arrancó el proyecto: “Nosotros somos una especie de ‘spin-off’ de GoGoA, una empresa que se dedica al desarrollo de exoesqueletos para el campo médico. Tanto mi mujer como mi hijo y yo somos muy aficionados al esquí y pensamos en aplicar esta tecnología del campo médico al mundo industrial y al deportivo y vimos que en el campo del esquí podría haber una oportunidad por el tipo de movimiento que se realiza”.
La aventura comenzó hace ya algo más de un lustro. “Entre los años 2018 y 2019 comenzamos a desarrollar el exoesqueleto y lo presentamos justo antes de que empezase el año 2020, pero llegó la pandemia y nos obligó a parar todo. El diseño del equipo y el desarrollo lo hizo Gálder Fernández, pero con la cuarentena no pudimos continuar hasta ahora, que hemos retomado el proyecto comercial con las miras puestas en esta temporada y, sobre todo, en la próxima”, nos cuenta Carlos.
Obviamente, uno lee que tiene que utilizar un exoesqueleto para esquiar y lo primero que le viene a la mente son dificultades, problemas, otro trasto que añadir a botas, bastones, esquís, casco, guantes… Pero nada más lejos de la realidad. “El exoesqueleto se pone en sólo unos segundos con velcros a los muslos (cada uno pesa 400 gramos) y se engancha también a la bota sin necesidad de modificar nada. Dentro lleva un cilindro hidroneumático en el que puedes variar el punto de ataque para que sea más o menos fuerte en función de lo que necesites”, explica.
¿Y dónde está el secreto? ¿Cómo funciona? “Esta herramienta te permite reducir unos 15 kilos la carga en cada pierna así que, por un lado, te vas a cansar bastante menos, y, por otro, vas a poder controlar mejor los esquís y ser más rápido de una manera más controlada. Vas a controlar mucho mejor la trazabilidad de los esquís porque toda la fuerza que tú haces la transmites mejor al suelo”, asegura Carlos Fernández.
¿Y esto, a nivel físico, en qué se traduce? “Tienes una recuperación mucho mejor, te cansas mucho menos porque haces menos esfuerzo o, haciendo un esfuerzo similar, lo aprovechas más para poder ir más fuerte, más rápido y con mayor control. A mí me gusta compararlo con la bici eléctrica en todos los sentidos”.
Xnowers fue concebido desde su origen pensando en un target muy claro: “El público al que está orientado sobre todo es gente que está sobre los 50 años, que, quiera o no, ha ido perdiendo ciertas capacidades y perdiendo control sobre todo con el paso de las horas esquiando. La idea pasa por disfrutar más del esquí y durante más tiempo, sin acabar agotado y con dolores tengas la edad que tengas”.
En Levier tenían muy claro también que hay un núcleo importante de esquiadores que no llega en la mejor forma posible a ‘su semana de esquí’ con independencia de la edad. “También pensamos en la población que no puede estar todo el día entrenando fuera de temporada y no está con la forma suficiente. Cuando eres más joven lo suples con la energía que tienes, pero para los que rondamos los 50 es una ayuda perfecta para aguantar y disfrutar más del esquí… y poder seguir a nuestros hijos”, apunta Carlos.
A nivel anatómico, el Xnowers supone un beneficio objetivo "para que tus cuádriceps, fundamentalmente, sufran menos, aunque también sufren menos los gemelos y la zona lumbar”. Además, también te ayuda a mejorar tu postura: “Como te acompaña el movimiento, te ayuda a hacer el movimiento correcto, con lo que te ayuda a esquiar mejor”.
Pese a que su penetración en el mercado no ha sido la esperada por culpa de la pandemia, ya se empieza a ver este tipo de artículos en las pistas. Xnowers, de hecho, fue el primero, pero no es el único exoesqueleto enfocado a la práctica del esquí: “En estos momentos hay tres exoesqueletos en el mercado además del nuestro, aunque nosotros fuimos los pioneros. Hay uno americano de la empresa Ruan Robotics, que es un sistema neumático, que va con una mochila y lleva unas baterías y un compresor neumático; otro de una empresa Letona, que se llama Nagaina; y luego están unos franceses, Ski-Mojo”.
En la actualidad, el precio de Xnowers supera los 1.000 euros, por lo que puede ser considerado un producto de lujo pese a que el esquí no es un deporte precisamente barato. Sin embargo, la idea en Levier pasa por conseguir implantar esta tecnología en las estaciones de forma que se puedan alquilar junto al resto del equipo, algo que ya se probó en Formigal justo antes de la llegada del Covid.
No serán los esquiadores amateurs los únicos que disfruten de esta tecnología puntera al deslizarse por las pistas, ya que instituciones como el ejército español ya han tomado buena nota y disponen de ellos para reducir el cansancio de los militares en las maniobras de esquí en montaña. También hay monitores en diversas estaciones y miembros del equipo nacional de esquí que se han interesado por este producto y ya lo están usando, si bien, obviamente, no se puede utilizar en competición.