Desde hace unos años, el CrossFit se ha convertido en el deporte por excelencia para los que buscan desarrollar la resistencia cardiovascular, resistencia energética, fuerza, flexibilidad, potencia, velocidad, coordinación, agilidad, equilibrio y precisión a través de ejercicios funcionales de alta intensidad. Aunque en un primer momento el tipo de rutina fue implantada en el deporte de élite o en academias militares o de policía, se ha consolidado como una disciplina adaptable a cualquier persona, independientemente de su edad o de su experiencia previa. Es el caso de Celia Duff, de 70 años, que posee en la actualidad dos récords del mundo en su categoría de edad.

Médico jubilada desde 2017, madre de un hijo, abuela de su primera nieta, Poppy, y amante de los perros y gatos. Así se define en sus redes sociales Celia, a quien sus miles de seguidores en su cuenta de Instagram también conocen como ‘Badass Gran (abuela peleona)’, un apodo que a menudo incluye impreso en algunos de los estilismos con los que disputa sus entrenamientos o maratones. A sus 70 años, la deportista comparte a través de su perfil público las distintas rutinas que ejerce en su día a día, así como la dieta que sigue para complementar el ejercicio. Un estilo de vida saludable que ya le han convertido en un ejemplo a seguir tanto para los individuos de su edad como para los jóvenes que siguen de cerca sus avances.

Sus pasos, además, le han llevado a subirse al podio de los récords mundiales hasta en dos ocasiones gracias a los tiempos que ha desempeñado para completar HYROX, una competición en la que los participantes corren un total de ocho kilómetros divididos en bloques de un km y en la que, tras finalizar cada uno de esos kilómetros, llevan a cabo una estación de entrenamiento de workout diferente con el objetivo de completarlo lo más rápido posible.

También se ha proclamado campeona del mundo de la categoría individual femenina de su grupo de edad, y ha conseguido rebajar un 15 % su tiempo final entre su cuarta carrera del año pasado y su primer evento en 2022. Sin embargo, durante toda su vida ha sido muy activa, desde que se unió al equipo de remo y aerobic de la Universidad de Cambridge hasta los noventa, cuando se alistó en el Ejército Territorial y empezó a asistir a clases coreografiadas de halterofilia y boxeo aunque, tal y como reconoció a Womens Health, “todo se fue apagando y no fue hasta los 68 años cuando se puso las pilas".