La concienciación sobre la prevención del cáncer de mama es clave. Los datos son claros, según la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) en 2023 se diagnosticaron 35.001 casos nuevos en nuestro país, siendo el más frecuente en mujeres por delante del resto de tumores, especialmente entre los 45 y 65 años, la franja de edad de mayor incidencia. Ahora, un grupo de investigadores ha desarrollado un dispositivo que pude detectar los biomarcadores del cáncer de mama con una muestra de saliva en solo cinco segundos.
Según datos de 2021 del Centro de Investigaciones sobre el Cáncer, el cáncer de mama es el tumor más diagnosticado del mundo, por delante del cáncer de pulmón. Solo en España, alrededor del 30% de los cánceres que se diagnostican en mujeres tienen su origen en la mama.
Este dispositivo ha sido desarrollado por investigadores de la Universidad de Florida y de la Universidad Nacional Yang Ming Chiao Tung, publicando su estudio en Journal of Vacuum Science & Technology, y utiliza tiras reactivas de papel que han sido tratadas con anticuerpos específicos que interactúan con biomarcadores específicos de cáncer.
¿Cómo funciona? Sobre la tira se debe colocar una muestra de saliva y, seguidamente, se envían una serie de pulsos de electricidad a los puntos de contacto del dispositivo. Esos pulsos consiguen que los biomarcadores se unan con los anticuerpos alterando la carga sobre el electrodo, produciendo un cambio en la señal de salida.
De esta manera, con solo una gota de saliva, se pueden lograr resultados bastante precisos, con resultados positivos en sus pruebas con mujeres, donde se ha distinguido claramente quienes estaban sanas y quienes padecían cáncer.
La principal motivación de este avance es porque se pone por delante de otras alternativas en la detección del cáncer de mama, como las mamografías o las resonancias magnéticas, más invasivas y costosas que requieren de unos equipos específicos, una leve exposición a la radiación y, además, tardan varios días en señalar los resultados.
Por su parte, se trata de un dispositivo de bajo coste gracias a los materiales que utiliza, disponibles en cualquier hospital. “Es una excelente opción porque es portátil y reutilizable. El tiempo de prueba es inferior a cinco segundos por muestra, lo que la hace muy eficiente”, ha explicado uno de los investigadores principales del proyecto, Hsiao-Hsuan Wan. ¿Su precio? Podría costar solo unos cinco euros.
En los últimos años han ido surgiendo, a través de diversas investigaciones, nuevos métodos para la detección del cáncer. Uno de los últimos y más innovadores es un análisis de sangre que expuso un estudio publicado en The Lancet. Se trata de una biopsia de sangre líquida que muestra los restos de ADN tumoral, una información muy valiosa para los oncólogos.
Se trata de una técnica que se puede aplicar de diferentes formas. En los casos en los que hay metástasis se pueden detectar mutaciones, mientras que quirúrgicamente es posible conocer cómo responde un paciente tras una operación. Durante el proceso de tratamiento de quimioterapia también es valioso para medir el ADN tumoral y posibles recaídas.