"Siempre cansada": la señal más inadvertida del hipotiroidismo

  • Pese a que lo padece el 9% de la población, el hipotiroidismo es una enfermedad infradiagnosticada, ya que muchos de sus síntomas son poco específicos y se asemejan a los de otras patologías

  • El síntoma más común o precoz es la fatiga, una circunstancia normalizada entre la población general, especialmente entre las mujeres, el colectivo más afectado

  • La glándula con tamaño de un guisante que regula todo tu sistema endocrino

Tiene forma de mariposa y en cada aleteo, nuestra salud cambia. El tiroides es esa pequeña glándula situada en la región anterior del cuello, con la mencionada forma de mariposa y una función esencial: producir hormonas encargadas de controlar la forma en que el organismo utiliza la energía, afectando a casi todos los órganos y controlando muchas de las funciones vitales como la respiración, el ritmo cardíaco, el peso, la digestión o el estado de ánimo.

Las enfermedades del tiroides son algunas de las más extendidas del mundo. El hipotiroidismo, la variedad más común, afecta aproximadamente a un 9,1% de la población española. Se caracteriza por la disminución de la actividad funcional de la glándula tiroides, que no produce la cantidad suficiente de hormonas para satisfacer las necesidades fisiológicas. No obstante, en más del 90% de los casos de hipotiroidismo, el problema no está en la propia glándula, sino en una enfermedad autoinmune conocida como tiroiditis de Hashimoto.

Síntomas inespecíficos

Una de las características del hipotiroidismo es que es una enfermedad infradiagnosticada, ya que muchos de sus síntomas son poco específicos, variables, inconsistentes, infrecuentes o similares con los de otras patologías.

Los pacientes de hipotiroidismo suelen experimentar aumento de peso, piel seca, sensibilidad al frío, depresión, pérdida de cabello y problemas de concentración, entre otros. Sin embargo, el síntoma más común o precoz es la fatiga. Así lo confirma el doctor Carles Zafón Llopis, coordinador del área de Tiroides de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN). Zafón, además, advierte de que la normalización del cansancio entre la población general podría estar retrasando el diagnóstico. "El infradiagnóstico existe, probablemente en las fases iniciales de la enfermedad, y es a través de una analítica cuando se encuentra la causa que está provocando esta fatiga. Entre el 75 80% de los pacientes presenta el cansancio como primer o principal síntoma".

El hipotiroidismo, más común entre mujeres

La enfermedad es más frecuente en las mujeres. “El hipotiroidismo se suele diagnosticar a partir de los 25 años. La etapa crítica es el embarazo, porque el riesgo de hipotiroidismo es mayor y la repercusión también. Debemos prestar especial atención en el diagnóstico en mujeres en edad fértil. Si no se controla durante la gestación, aumenta el riesgo de, entre otros, la preeclampsia en la mujer y el daño neurológico, retraso madurativo o bajo peso al nacer en el feto", advierte el experto.

Por otra parte, existe una relación entre el climaterio y el hipotiroidismo. Según el Instituto de la Menopausia, aunque la enfermedad puede darse en edades jóvenes, es muy probable que los primeros síntomas surjan durante la menopausia, algo que ayuda a infradiagnosticar la enfermedad. Como hemos visto, algunos síntomas de este problema tiroideo son similares a los de la menopausia, evitando el tratamiento, con las graves consecuencias que puede acarrear.

¿Se puede prevenir con la dieta?

En principio, no existe ninguna dieta que ayude a mejorar el funcionamiento de una tiroides hipoactiva. Aunque abunden las afirmaciones sobre las dietas para el hipotiroidismo, no hay pruebas de que comer o evitar ciertos alimentos ayude a mejorar el funcionamiento de la tiroides cuando está hipoactiva.

El yodo es el micronutriente más vinculado a la tiroides. Según explica la Clínica Mayo, un nivel adecuado de yodo en la dieta es esencial para la función normal de esta glándula. En los países desarrollados, la enfermedad de la tiroides por carencia de yodo prácticamente ha desaparecido debido al suplemento de yodo de la sal y los alimentos. Si se tiene una alimentación equilibrada, no es necesario tomar suplementos de yodo. De hecho, un exceso de yodo puede favorecer la aparición de hipertiroidismo.

En suma, no es prudente tomar sin prescripción médica suplementos contra el hipotiroidismo. Ante una tiroides hipoactiva, lo habitual es tomar medicamentos de reemplazo siguiendo las indicaciones de un profesional médico.