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Sentarte en el suelo 30 minutos al día puede prolongar tu vida

Dice la sabiduría popular que solo nos caemos para aprender a levantarnos. Pero ese mensaje de resiliencia y optimismo buen rollista podría tener un sustento real, según una experta en movimiento corporal. Para Juliet Starret, coautora junto a Kelly Starret del best seller, "Naciste para moverte: 10 hábitos esenciales para mejorar tu movilidad y retrasar el envejecimiento", sentarse y levantarse del suelo es una "habilidad crítica que hemos ido ido perdiendo como humanos" pero cuya práctica tiene una serie de beneficios asociados a la longevidad.

Para la experta, una de las mayores causas de las lesiones de muerte después de los 65 años son las caídas. "Estadísticamente, pocas personas mayores viven más de dos años después de una caída, y la mejor forma de no convertirte en una de esas estadísticas es ejercitando la capacidad de bajar y subir del suelo".

Beneficios de aprender a levantarte

Practicada diariamente como un ejercicio, esta habilidad fortalece tu movilidad y equilibrio, mejora la fuerza, la movilidad de tus caderas y el equilibrio, haciéndote más resistente a las caídas. Para Starret, si somos capaces de pasar tres horas o más frente al televisor, el tiempo ya no es una excusa, y dedicarle 30 minutos diarios a mejorar nuestra capacidad para levantarnos "es un cambio pequeño con grandes beneficios".

Según la Guía sobre Deporte y Envejecimiento Activo, desarrollada en colaboración con la Fundación Patrocina un Deportista y el grupo de investigación ACAFYDE de la Universidad de Extremadura, en la actualidad, el 50,5% de las personas mayores de 55 años en España practican gimnasia suave, muy por encima del 38,5% del año 2015. Lo mismo ocurre con el senderismo, que se incrementó del 27,3% al 30,8%, y con el ciclismo, que hizo lo propio de un 22,8% a un 25,5%. Eso quiere decir que nos movemos, pero aún así, en 2023, las caídas superaron a los suicidios como primera causa de muerte externa (no por una enfermedad), según la estadística de defunciones del INE. Se trata de una realidad desconocida entre la población porque no solemos relacionar caída con riesgo de muerte.

Tal vez, como señala esta autora, la simple practica de aprender a subir después de bajar, puede ayudarnos a ser más duraderos y a estar más preparados para una vida más activa y funcional, incluso en la vejez. Se trata en suma, de "tu mejor defensa contra el envejecimiento".