Enero es el mes más propicio para que los virus campen a sus anchas entre la población. Las temperaturas más bajas que se registran en esta época del año y el aumento de interacciones sociales en espacios cerrados propios de las fiestas navideñas están provocando la proliferación de toses, mocos, dolores de garganta y cabeza, cansancio y vómitos que se asocian principalmente a las patologías infecciosas y que, en mayor o menor medida, prácticamente todos estamos padeciendo. Y eso que el pico de contagios aún no ha llegado.

Antes de ir a la farmacia en busca de un remedio o, si la cosa se pone fea, a urgencias, la gran pregunta que uno se hace cuando comienza a experimentar síntomas es qué virus le habrá tocado. Sea una gripe, un catarro común, el covid o el sincitial, la clave para la recuperación siempre pasa, en primer lugar, por el reposo y la hidratación. Después ya llegarían el paracetamol, el jarabe para la tos y cualquier otro tratamiento sintomático. Estos son los principales virus y afecciones que circulan en España durante los primeros días de 2025.

Se trata de una infección leve de las vías respiratorias altas (nariz, faringe, cuerdas vocales) que pueden causar más de 200 virus, aunque el más común es el rinovirus. Sus síntomas alcanzan su punto máximo al segundo o tercer día. Suele empezar por la nariz y la garganta para después bajar a los bronquios. Se traducen en congestión nasal, estornudos, mocos abundantes, dolor de garganta y cansancio leve. No hay ningún medicamento que lo cure, aunque el paracetamol ayuda a mejorar sus síntomas. La receta pasa por descansar, beber agua y tomar infusiones en abundancia.

Es similar al resfriado pero sus síntomas suelen ser más intensos y duraderos. Los virus del tipo A y B son los más frecuentes -siendo la gripe A más grave al tener mayor capacidad de mutación- y muy contagiosos. La enfermedad suele comenzar de forma brusca, con fiebre y escalofríos, acompañados de dolor de cabeza y garganta, congestión nasal, malestar general, dolores musculares, pérdida de apetito y tos seca. Nada de recurrir a antibióticos y sí al tratamiento sintomático. Los conocidos como antivirales, solo bajo prescripción médica.

Al igual que pasa con la gripe, el covid se presenta como una afección general y sistémica, pero distinguir ambas es muy complicado si no se recurre a un test. Eso sí, los afectados por el SARS-Cov-2 pueden tardar más tiempo en manifestar síntomas. Actualmente predominan la tos seca, el dolor muscular y de garganta, el cansancio, la fiebre y la congestión nasal. A veces hay diarrea y náuseas. Salvo en pacientes de alto riesgo, la mayoría de la gente lo pasará y tratará como una gripe.

Es una enfermedad viral común que causa síntomas leves parecidos al resfriado, siendo lo más característico una tos persistente. En adultos y niños sanos no suele haber complicaciones, pero puede provocar infecciones pulmonares graves en bebés, adultos mayores y personas con problemas médicos serios.

Ha sido el virus estrella de las navidades y sigue llenando las consultas. Es una de las principales causas de gastroenteritis agua en todo el mundo y es altamente contagioso. Provoca vómitos, diarrea, dolor muscular y fiebre que aparecen de repente, sin señales previas. Estos síntomas suelen durar alrededor de 24 horas, aunque pueden prolongarse unos días más.