Recuperar la identidad, nuevos retos y otros tips para superar una ruptura después de los 50

Cuando menos te lo esperas el amor puede acabarse, causado por un engaño, un error, una traición o simplemente porque se acabó el amor. Muchos se separan a los pocos años de empezar su relación pero otros duran mucho más, llegando a pasar juntos años y décadas.

Terminar una relación de pareja puede ser muy doloroso, pero cuando este ocurre a los 50 años se complica con la llamada crisis de la mitad de la vida, a diferencia de una pareja joven, cuando la unión lleva mucho tiempo, el impacto puede ser muy dramático, aquí entra en juego la división de bienes, los amigos en común, los hijos y otros problemas de una larga relación.

Superar una ruptura en pareja es un proceso que requiere de mucha estabilidad emocional, además de tener que aprender a vivir de nuevo sin esa persona que ha estado tanto tiempo a tu lado y con la cual has compartido tantas cosas. Muchas personas renuncian a separase a los 50 porque se ven muy mayores para afrontarlo, porque piensan que ya es demasiado tarde o porque están tan acostumbrados a su vida que les da mucho miedo cambiarla. Todo se complica cuando, además, están los hijos de por medio y por miedo a su sufrimiento decides no separarte nunca.

Pero no podemos negar que una ruptura superados los 50, trae consigo ciertos retos únicos que quizás si hubiese dado esta situación con anterioridad hubieran sido diferentes. Tú y tu ex tenéis un pasado juntos, décadas seguramente. La familia, los amigos, los vecinos... todos os conocen como una pareja, siempre juntos. Es posible que no sepas cómo tienes que actuar o cómo se supone que debes hacer las cosas en busca de superar la ruptura. Durante las últimas décadas has pensado en ti como una persona en pareja y ahora hay que afrontar la nueva situación de la mejor manera posible. Afrontar el divorcio a los 50 es igual que en cualquier otra edad, lo que debes hacer es volver a empezar de cero con más ganas y más fuerza que nunca. No olvidarse de uno mismo, quererse mucho y volver a poner en práctica todos aquellos hobbies olvidados hasta ahora.

Tiempo al tiempo. Aunque sientas que una separación a esta edad significaría el fin de todo, las cosas no son así, debes saber que en medio de todo tu vida no se acaba, esta será una etapa que se cierra para empezar o comenzar otra, que será nueva y mejor.No te dejes consumir por el dolor y los sentimientos negativos que te invaden, estos deben ser superados, busca las fuerzas y las ayudas en las cosas positivas que hay en ti, en tu valor, en tus cualidades, en tus amigos y familiares, ellos serán la fuente de energía y de apoyo para recuperarte.

Separación amistosa. En esta etapa de tu vida lo menos que necesitas es complicarte las cosas y tener enemistades, por eso debes buscar en lo posible que el proceso de separación sea amistoso, esto te beneficiará a ti, a tus hijos (si los tienes) y a la familia de ambos.

Recupera tu identidad. Vuelve a realizar esas cosas que habías dejado de lado por culpa de las rutinas del matrimonio. Aprovecha para hacer todo aquello que nunca has hecho, como un hobbie. Ahora tienes tiempo de lanzarte a realizarlo.

Nuevos retos. Ponte objetivos, retos o cosas a nivel vital. Esta nueva etapa de tu vida tiene que aportar cosas, situaciones y momentos buenos, no quitarte otras cosas. En general son fases y etapas de la vida, y no por ello tienen que ser peores que las anteriores.

No Descuides Tu Aspecto. Muchas personas después una ruptura tienden a descuidarse, pues el duelo las hace sumergirse en un descuido de su aspecto donde no les importa nada, su autoestima se ve muy afectada. Aunque ya tengas cierta edad no tienes por qué caer en ese sentir, arréglate, cuídate, haz ejercicio, cuida tu aspecto, el cómo te ves físicamente expresará cómo te sientes en tu interior, si tú no te quieres nadie más lo va hacer por ti.

Es el momento de viajar. Conocer mundo y lugares nuevos es una buena terapia y una buena manera de volver con las pilas cargadas. Renovarte es posible, pero todavía lo es más si estás a miles de kilómetros de tu zona de confort.

Busca ayuda profesional si es necesario. Los psicólogos también pueden ayudarte a reconstruir el equilibrio mental y emocional que parece haberse roto después de una separación.

Vive el momento. Vive el día a día con una sonrisa. No mires demasiado al futuro y céntrate en vivir el presente con alegría y optimismo. Has tomado una difícil decisión, pero ahora te toca vivir tu nueva vida de la mejor manera posible.