Escamas capilares en la edad adulta: qué son, por qué aparecen y cómo puedo acabar con ellas
Cuanto más comprendamos nuestra piel, mejores cuidados podremos aportarle
Las afecciones dermatológicas no suelen ser de gran gravedad pero sí son comunes entre la población y sus síntomas son molestos y afectan la calidad de vida de los que las padecen
La piel es en el órgano más visible del ser humano y posiblemente uno de los más vulnerables de sufrir afecciones. A pesar de que las enfermedades cutáneas no suelen ser graves, los síntomas sí son molestos y en algunas ocasiones hasta pueden afectar al estado anímico del paciente.
Tan importante como el cuidado del cabello es la atención que le debes dar a la piel de donde este nace, ya que puede verse afectada por problemas tan comunes como la caspa o más complejos como la psoriasis. Las escamas y rojeces en la piel del cuero cabelludo pueden estar relacionadas con varias patologías dermatológicas crónicas específicas de las pieles sensibles y reactivas que comentamos a continuación.
- Caspa. Se caracteriza por escamas blancas y amarillas que se forman en el cuero cabelludo. A menudo, estas se caen al tocar el cabello, dejando manchas visibles a lo largo de los hombros, muy notables sobre todo en ropa oscura. Se trata de una forma leve de dermatitis seborreica.
- Dermatitis seborreica. Es frecuente en adultos de 30 a 70 años con piel o cabello graso, acné o psoriasis. Se da en casos severos de caspa en los que existe un enrojecimiento del cuero cabelludo y una gran cantidad de grasa. Se desconoce la causa exacta por las que se presenta la dermatitis seborreica pero se sabe que la ‘Malassezia’, una levadura normal de la piel, juega algún papel importante. Suele generar picor de intensidad variable.
- Psoriasis. Se da cuando el cuerpo no puede eliminar las células de la piel a un ritmo normal, lo que provoca una acumulación de células que forma parches rojos con escamas gruesas y con costra que pueden hacer sentir comezón o dolor.
- Foliculitis. Se llama así a la inflamación o infección del folículo piloso (el saco que contiene la raíz del cabello), causando bultos que pueden tener apariencia de puntos blancos o una gran ampolla roja. Por lo general, es producida por bacterias que se introducen en los folículos capilares debido a una infección cercana.
- Eczema. Se trata de un sarpullido de color rojo a marrón, que produce comezón y se ve como pequeñas protuberancias elevadas cuando se observa de cerca.
- Tiña. Se trata de una infección que deja erupciones redondas, escamosas y rojas, sí como zonas calvas de aspecto escamoso que producen picazón.
- Impétigo. Es una infección de la piel marcada por llagas rojas que estallan y luego forman una costra naranja o amarilla. Causa escozor y suele ser muy contagiosa.
Cómo mantener el cuero cabelludo sano
Para ayudar a combatir todo tipo de escamas en el cuero cabelludo que lleven a un incómodo picor podemos tomar las siguientes medidas:
- Lávate el cabello con un champú suave cada dos o tres días. Si lo haces más a menudo eliminarás los aceites naturales del cuero cabelludo que acondicionan el folículo piloso. Si eres propenso a las raíces grasosas, los profesionales dicen que una limpieza diaria está bien, siempre y cuando uses una fórmula suave y sin sulfatos.
- Cepíllate el cabello todos los días. Antes de la ducha, te permite eliminar las células muertas de la piel que pueden obstruir los folículos, también estimula la circulación y lleva el exceso de grasa a los extremos del cabello para hidratarlo. Lo mejor es usar un cepillo de cerdas naturales.
- Aplica aceites esenciales en tu cuero cabelludo. Para maximizar el crecimiento saludable del cabello, recomiendan el aceite esencial de romero que estimula la circulación, mientras que los aceites esenciales antisépticos de lavanda y té de árbol ayudan a combatir la caspa fúngica.Simplemente agrega unas gotas del aceite esencial y masajea tu cuero cabelludo antes de acostarte durante un par de minutos y duérmete.
- Lava bien tu cabello en la ducha matutina.
- Lleva una dieta saludable. Comer bien tiene efecto directo sobre nuestra piel.
- Disminuye la exposición al sol. Igual que la piel de la cara o los brazos se puede quemar hay que prestar también atención a la piel de la cabeza y protegerla con gorras y sombreros, más aún si se es calvo.
- Evita productos químicos para el cabello. Los productos de belleza que usamos pueden ser dañinos aunque los resultados sean bueno.
- Corta el cabello regularmente para mejorar su calidad.
- El estrés es una de las causas más comunes de los trastornos en el cuero cabelludo como la caída o la caspa. Lo ideal es detectar las áreas de la vida que generan ansiedad y tratar de mejorarlas.