Una vez. Y otra. Y otra más. Lo que podía parecer un problema puntual, se convierte en uno real y prolongado en el tiempo. La disfunción eréctil es una patología que afecta a millones de hombres alrededor del mundo, y es más probable cuando se superan los 40 o 50 años. Es normal que pueda ocurrir, no se es un bicho raro. Por suerte, existen tratamientos para que todo sea mucho más sencillo y que los hombres que la sufren puedan mantener relaciones sexuales satisfactorias. Uno de ellos es una pastilla y no, no es la Viagra. Es otra alternativa: la Levitra.
La disfunción eréctil es una patología difícil de llevar física y psicológicamente, que puede tener su causa en otras enfermedades, sobre todo vasculares o en personas con diabetes o hipertensión. Pero también tiene un factor psicológico, relacionado con la ansiedad, el mal aprendizaje sexual o la presión que tiene uno mismo o que le ha infundado su pareja. Cuando ocurre una o dos veces se puede mantener cierta calma, pero desde que empieza a prolongarse en el tiempo, es momento de acudir al urólogo.
Seguramente el especialista te valorará y verá qué tratamiento puede ser mejor para ti. Porque aunque no lo creas, hay un mundo lleno de posibilidades más allá de la pastilla milagrosa azul, la Viagra. Cambio del estilo de vida, inyecciones o prótesis, pero también otros fármacos muy similares a la Viagra.
Y aquí entra la Levitra, el nombre comercial del vardenafilo, un medicamento que apareció en el mercado farmacéutico unos cinco años después que la Viagra. Se ha demostrado que su uso ha mejorado la calidad de las erecciones de la mayoría de los hombres que la ha tomado.
Si te preguntas cómo funciona esta pastilla, es muy similar a la Viagra. Se suele tomar entre media hora y una hora antes de mantener relaciones sexuales y, siempre que haya estimulación, se puede tener una erección hasta cuatro o cinco horas después de su consumo. Eso sí, el prospecto lo deja claro: solo una pastilla al día.
Ten en cuenta que su consumo puede acarrear efectos secundarios que tendrás que comunicar a tu especialista en caso de se produzcan. Entre ellos está el dolor de cabeza, mareos o la disminución de la visión de uno o ambos ojos.
Mucho cuidado con cuando la tomas, puesto que se recomienda no hacerlo después de una comida muy contundente o con demasiado contenido en grasas, dado que lo más probable es que retrase el efecto de la pastilla. Tampoco se debe hacer con bebidas alcohólicas, pues podría empeorar los problemas de la erección.
La Levitra no es una solución para todo el mundo. Por ejemplo, no esta indicada para aquellos que padezcan enfermedades graves relacionadas con el corazón. Por supuesto y como en cualquier medicamento, si eres alérgico al vardenafilo, el compuesto principal de Levitra, no debes tomarla, así como si se tiene la tensión arterial baja.
Probablemente cuando empieces a buscar información sobre la Levitra te encontrarás con que hay tres distintas. De cinco miligramos, de 10 y de 20. La que se suele consumir es la de 10, aunque a través del seguimiento del urólogo, este puede subir la dosis a 20 o bajarla a cinco dependiendo de la evolución que tenga cada paciente.
La ciencia y la investigación han dado soluciones a casi todas las patologías, y sino, se buscan remedios para mejorar la calidad de vida de las personas. La disfunción eréctil puede afectarte a ti y a tu pareja, por eso lo mejor es tratarla cuanto antes.