Adiós al agotamiento: tés e infusiones que ayudan a combatir el cansancio a partir de los 50
Determinadas infusiones naturales pueden ser buenos aportes energéticos para combatir el agotamiento diario
Muchas de sus propiedades son beneficiosas para el organismo y permiten activar el sistema nervioso y mejorar la concentración
Lo normal es llegar al final del día agotado y caer rendido en la cama tras haber estado todo el día trabajando, después haber hecho algo de deporte, colaborar en las tareas de casa, y un sin fin de cosas más. Vamos, que tu día a día es un no parar y normal que cuando llegue la noche no seas capaz de terminar tu programa favorito porque la almohada te llama. Pero muchas veces el cansancio se acumula, en ocasiones ya ni duermes bien y te puedes sentir hasta fatigado, por lo que no vendría mal algún complemento que te ayudase a combatir el cansancio que últimamente protagoniza tus días.
Para ello puede que tengas una solución más cerca de lo que crees y que te puede ayudar bastante. Te hablamos de las infusiones, pues muchas de ellas, como remedios naturales, tienen grandes propiedades que te aportan dosis de energía necesarias para afrontar el día de otra forma y llegar a la noche algo más activo y con la mente más despejada.
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El ginseng
Esta es una de las hierbas más utilizadas para conseguir más energía y así combatir el cansancio del día a día. Además, suele reforzar la circulación sanguínea y ayudar a mejorar la concentración y la atención, por lo que más allá de reducir el agotamiento corporal, también te ayuda con el mental, permitiéndote despejar más la mente. Como colofón, puede ser una hierba que actúe como afrodisíaco y, por tanto, ayude a prevenir la eyaculación precoz y despierte el apetito sexual.
Té verde
El té verde puede ser una gran aporte energético en tu día a día gracias a la presencia de vitaminas, minerales y proteínas que otorga al organismo. Por eso mismo ayuda a combatir el cansancio, en especial por su contenido en potasio y magnesio, que permiten reducir la fatiga y el dolor muscular. Además, su contenido en teína consigue mantener la mente más despierta, por lo que te mantiene más activo.
El té matcha
Esta infusión es muy similar al té verde, pues es una variedad japonesa del mismo que se ha puesto de moda y quizá deberías añadirla a tu dieta. Esta bebida consigue reducir el estrés que en ocasiones desemboca en una sensación de cansancio. Al conseguir relajarte, también mejora la concentración, por lo que es ideal para combatir los nervios e incluso para el buen funcionamiento del sistema cardiovascular.
El romero
Sí, esa planta que utilizas para dar sabor a algunas de tus comidas también puede ser una buena infusión para combatir el cansancio acumulado del día a día, pues permite que el sistema nervioso se active y te dé más energía para reducir la fatiga y el cansancio que se han apoderado de tu vida. Además de conseguir activarte, también permite que relajes tu mente y consigas una mayor concentración para el desempeño de tareas.
Guaraná
Es normal que en el supermercado encuentres alguna que otra bebida energizante carbonatada con guaraná que no son precisamente muy sanas, pero también se puede conseguir la semilla para hacer infusiones. Lo recomendable es tomarla por la mañana porque a la energía que aporta se le suma su contenido en cafeína, por lo que por la noche y en personas hipertensas no está del todo aconsejado, pero consigue mejorar la concentración y combatir el cansancio.
El jengibre
Las infusiones con jengibre se suelen recomendar por su poder antiinflamatorio e incluso analgésico, pero una taza al día también ayuda a aportar energía al organismo para la rutina diaria. De esta forma, estimula el sistema nervioso para mantenerse activo, mejorar el rendimiento y ser una fuente de vitaminas y minerales para el cuerpo.
Cola de caballo
A pesar de que en general la infusión de cola de caballo se utiliza para adelgazar, luchar contra la retención de líquidos o fortalecer el cabello y endurecer las uñas, lo cierto es que es una bebida que puede ayudar a luchar contra el agotamiento gracias al fortalecimiento que produce en el organismo, en especial en los huesos.