Las úlceras estomacales, también conocidas como úlceras gástricas, son llagas dolorosas en el revestimiento del estómago y son un tipo de enfermedad de úlcera péptica, que a su vez es cualquier úlcera que afecta tanto al estómago como al intestino delgado.
Las úlceras estomacales aparecen cuando se reduce la capa gruesa de mucosa que protege el estómago de los jugos digestivos. Esto permite que los ácidos digestivos se coman los tejidos que recubren el estómago, lo que provoca una úlcera. Las úlceras estomacales pueden curarse fácilmente, pero pueden agravarse sin el tratamiento adecuado.
Existen una serie de síntomas asociados con las úlceras estomacales. La gravedad de los mismos depende de la severidad de la úlcera y el más común es una sensación de ardor o dolor en el medio del abdomen, entre el pecho y el ombligo. Por lo general, el dolor será más intenso cuando su estómago esté vacío y puede durar desde unos pocos minutos hasta varias horas.
Otros signos y síntomas comunes de las úlceras incluyen:
Las úlceras estomacales casi siempre son causadas por una infección con la bacteria Helicobacter pylori (H. pylori), o el uso a largo plazo de medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE), como la aspirina, el ibuprofeno o el naproxeno.
Excepcionalmente, una afección conocida como síndrome de Zollinger-Ellison puede causar úlceras estomacales e intestinales al aumentar la producción de ácido en el cuerpo. Se sospecha que este síndrome causa menos del 1% de todas las úlceras pépticas.
El diagnóstico y el tratamiento dependerá de sus síntomas y de la gravedad de su úlcera. Para diagnosticar una úlcera estomacal, su médico revisará su historial médico junto con sus síntomas y cualquier medicamento recetado o de venta libre que esté tomando.
Para descartar una infección por H. pylori, se puede ordenar una prueba de sangre, heces o respiración. Con esta última, se le indicará que beba un líquido claro y respire dentro de una bolsa, que luego se sella. Si está presente el H. pylori, la muestra de respiración contendrá niveles más altos de lo normal de dióxido de carbono.
Otras pruebas y procedimientos utilizados para diagnosticar las úlceras estomacales incluyen:
Actualmente son muchos los fármacos que pueden emplearse para la enfermedad ulcerosa. Algunos de los más importantes son los siguientes:
Debido a la gran eficacia del tratamiento médico de la úlcera, la cirugía queda reservada para unas pocas situaciones: la presentación de alguna complicación como hemorragia o perforación, en aquellos casos en los que no se pueda descartar un componente maligno y ante la presencia de una úlcera refractaria, es decir, aquella úlcera que no ha cicatrizado tras más de 12 semanas de tratamiento médico correcto.
Son muchas las técnicas empleadas para el tratamiento quirúrgico, clásicamente la úlcera gástrica se trataba con resecciones del estómago y la úlcera duodenal mediante vagotomía (técnica en la que se seccionan nervios implicados en la secreción ácida, de forma que esta disminuye).