Quizás llevábamos mucho tiempo en cierta penumbra. Quizás, tras la incertidumbre de este último año y medio empiezan a vislumbrarse algunas certezas. Quizás, este fin del estado de alarma, en el que nos tenemos que seguir cuidando con todas las precauciones ante una pandemia aún activa, sirva para que podamos empezar a escribir en nuestro calendario nuevas aventuras. Lo que es seguro es que en unas semanas se empieza a vacunar a los cincuentones y el mundo se va abriendo. Amanece, que no es poco.