La especia que ayuda a reducir la inflamación y el riesgo de cáncer

Mucha gente rechaza el picante pensando que puede ser perjudicial o sentarle mal al estómago, o simplemente porque no soporta la sensación de ardor en la boca. Pero lo cierto es que la capsaicina, el compuesto responsable de ese picor que conduce al 'calentón', posee numerosos beneficios para la salud: reduce el riesgo de enfermedad coronaria, ayuda a regular el nivel de azúcar en sangre e incluso favorece la digestión.

Dentro de las especias picantes que contienen capsaicina nos vamos a centrar en el pimiento de Cayena, o simplemente cayena. Originaria de América del Sur y Central, su uso se ha extendido por todo el mundo. Se trata de un chile moderadamente picante, usado en España en las patatas a la riojana, para hacer salsa brava o para aderezar algunos alimentos.

La cayena tiene muchos nutrientes que benefician a nuestro organismo: entre ellos, vitaminas A, B1, B2, C, E y K, pero también mananeso, magnesio, potasio, betacaroteno, folato, fósforo, cobre, hierro, cinc, selenio, colina, luteína, zeaxantina y criptoxantina. Algunos de los beneficios más importantes que puede aportarnos son los siguientes:

Son varios los estudios que concluyen que el consumo de pimientos picantes reduce el riesgo de muerte por enfermedades cardiovasculares, respiratorias o por cáncer. Concretamente, la cayena ayuda a mejorar la salud cardiovascular al reducir el colesterol y los triglicéridos en la sangre. La capsaicina que contiene también  puede ayudar a mejorar la circulación sanguínea y reducir la presión arterial.

Sus propiedades digestivas pueden ayudar a aliviar la indigestión, los gases y la acidez estomacal. Aunque muchas personas asocian las comidas picantes con acidez de estómago, lo cierto es que la cayena ayuda a mejorar la absorción de nutrientes en el cuerpo, reduce la inflamación en el tracto digestivo y mejora la salud intestinal. Es, por tanto, un buen aliado para reducir el riesgo de enfermedades metabólicas.

Otra de las propiedades de la capsaicina es su capacidad analgésica natural, que reduce el dolor y la inflamación. Por esta razón se ha utilizado tradicionalmente como un tratamiento tópico para el dolor muscular y articular.

Sus propiedades antimicrobianas son muy efectivas para combatir infecciones bacterianas y fúngicas que pueden causar infecciones en la piel y los tejidos blandos, como impétigo y celulitis. Recomendable para personas con infecciones respiratorias, infecciones de la piel y otros tipos de infecciones.

La capsaicina ayuda a acelerar el metabolismo y puede promover la pérdida de peso. Según un estudio, tras consumir cayena hay menos deseos de comer alimentos grasos, dulces o salado. Quienes consumen una mayor cantidad de cayena pueden llegar a experimentar hasta una reducción de casi el 6% en la grasa corporal.