¿Te imaginas vivir en un mundo sin chocolate, vinos o cerveza? Sabemos que sí, suena como el argumento de una película post-apocalíptica, pero no es tan distante de la realidad. Algunos especialistas explican que uno de los mayores retos que desencadenan los efectos del cambio climático recae en la seguridad alimentaria. Y esto no sólo restringe la producción de ciertos alimentos, sino que también podría promover que muchos de los alimentos y productos favoritos que asumimos como parte de nuestra dieta y vida cotidiana podrían desaparecer o volverse muy, muy caros.
Las inundaciones, sequías, olas de calor y tormentas son fenómenos que se han intensificado en los últimos años como consecuencia del aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero que surgen del sistema de producción y la actividad humana, lo que ha provocado el fenómeno que conocemos como cambio climático.
Según el informe Climate Change: 2021: the Physical Science Basis, los expertos del The Intergovernmental Palen on Climate Change (IPCC) han explicado que el cambio climático apunta a un aumento de dos grados más en la temperatura global para el año 2050 (aunque el planeta ya se ha calentado 1,1°C) con lo que tendrá consecuencias en todo el mundo -que ya estamos percibiendo-, entre las que destacan el aumento de olas de calor, una disminución en las reservas de agua dulce y una subida del nivel del mar, por ejemplo.
Esto, inevitablemente, está teniendo consecuencias sobre los cultivos, la pesca y la ganadería y, por ende, sobre los alimentos que llegan a nuestros hogares. Aunque algunos alimentos como el cacao, el café o algunos cereales que consumimos cotidianamente no vayan a desaparecer inmediatamente, sí podremos ir percibiendo que comienzan a escasear y se volverán más caros.
Estos son algunos de los alimentos e ingredientes que podrían desaparecer como efecto del cambio climático.
Los principales países productores de café ya están viviendo las consecuencias del cambio climático en sus cosechas. Las altas temperaturas, sequías o lluvias intensas hacen que la calidad del café merme y los precios suban. Si esta situación continúa, más del 80% de los terrenos de cultivo de café de América Central y Brasil serán inservibles en el año 2050. Por su parte, el Instituto de Climatología de Australia advierte que el café podría desaparecer completamente en el año 2080 debido al cambio climático.
La planta del cacao se produce en ambientes cálidos y húmedos. Sin embargo, debido a que las temperaturas no dejan de aumentar y las lluvias son cada vez más reducidas, la humedad de la tierra donde crecen estos cultivos es cada vez menor, tal y como sucede en Costa de Marfil, el principal productor de cacao y responsable del 15% de la producción global, según cifras del Barómetro del Cacao en 2018, donde ya se han perdido más del 80% de sus bosques en los últimos 50 años debido a la producción masiva. Según un estudio realizado por la Universidad de California, la planta del cacao podría desaparecer también en el año 2050 debido a las altas temperaturas derivadas del cambio climático.
Según un estudio de la Universidad de Exeter (Reino Unido) publicado en la revista “Nature Climate Change”, el cambio climático también podría afectar al cultivo del plátano en algunos de los principales países productores y exportadores del mundo. La investigación demuestra que 10 países, incluido el mayor productor y consumidor mundial de plátano, la India, y el cuarto mayor productor, Brasil, verán una disminución significativa en los rendimientos de los cultivos en el año 2050 debido al cambio climático.
Los aguacates son uno de los alimentos más damnificados por el cambio climático ya que se trata de un cultivo de crecimiento lento y muy sensible a los cambios de temperatura. Además, según la organización holandesa Water Footprint Network se necesitan unos 2.000 litros de agua para producir un kilo de aguacates.
Varias investigaciones científicas han coincidido en señalar al cultivo de trigo como otra de las producciones más afectadas por el cambio climático. Tanto es así que se estima que para el año 2050 la producción de trigo caiga en un 25%.
Arroz
Es uno de los alimentos básicos más amenazados. Se pronostica que los campos de cultivo se verán perjudicados y puede que terminen obsoletos por los cambios bruscos de temperatura y clima impredecible. Según la FAO de Naciones Unidas, los cultivos de arroz, trigo y maíz representan un total de 51% de calorías que se ingieren por todo el mundo y la demanda podría crecer hasta un 51% a mediados de este siglo.