3,8 millones. Es el número de españoles que siguen una dieta vegetariana en nuestro país. Cerca del 10% de la población total, según el último estudio de la consultora Lantern. Ha dejado de ser una moda o una tendencia para convertirse en una realidad. Ante el auge de este tipo de alimentación, a la que se han sumado más de 800.000 personas en poco más de dos años, nos preguntamos cómo influye la edad en la ecuación y si es igual de saludable en cada etapa vital. Hablamos con Ana García Pocero, nutricionista de SESMI (Sociedad española de Salud y Medicina Integrativa) para que nos explique las particularidades que tener en cuenta a los 20, a los 50 y a los 70.
Ha ocurrido. Con lo que te gusta a ti el jamón, tu hijo, adolescente, ahora quiere ser vegetariano. Antes de nada, tranquilízate. Se trata de una alimentación saludable que incluye el consumo de huevos y lácteos. Unos datos. "La publicaciones científicas demuestran que los vegetarianos tienen menor incidencia de obesidad, tienen un 15% menos de riesgo de padecer cáncer y otorga beneficios motores", explica la dietista.
Una vez que ya puedes respirar tranquilo, García Pocero recomienda siempre acudir a un experto antes de empezar a seguir este tipo de dieta. "A los 20 se tienen una mayor demanda de energía, de vitaminas del grupo B y de betacarotenos por lo que es importante seguir la pirámide de alimentación vegetariana que se basa en el consumo de cereales de grano entero, legumbres y frutas y verduras frescas".
Sin embargo, si eres tú el que decide o decidió hace unos años, seguir una alimentación vegetariana debes saber que tus necesidades nutricionales van unidas a los cambios que está experimentando tu cuerpo. "La edad adulta va asociada a la pérdida de la capacidad funcional de algunos aparatos y a una depleción muscular (pérdida de masa muscular)", explica la nutricionista.
A partir de ahí recomienda seguir una dieta antinflamatoria con una base vegetariana que ayude al organismo a mantenerse en buen estado de salud. Podríamos hablar, por tanto, de una alimentación compuesta de alimentos con ácidos grasos omega – 3, fritas y verduras, hierbas y especias y huevos. "Hay que partir de la situación basal de cada paciente y si existe algún desequilibrio orgánico es importante corregirlo".
Si eres como Benedicta Sánchez, la actriz revelación de la última edición de los Goya, y sigues una alimentación vegetariana desde hace años o simplemente prefieres sumarte a ella tras los beneficios conocidos que aporta, debes tener en mente algo: los complementos multifórmula. Se trata de preparados nutricionales con carbohidratos, proteínas, grasas, vitaminas y minerales que se utilizan para completar la dieta.
"Son importantes ya que en este momento vital nuestro organismo tiene una menor capacidad para absorber nutrientes y esto no es específico para los vegetarianos, ocurre igual en los omnívoros. Tomando estos complementos se asegura que se cubren necesidades y la idoneidad de la dieta", aclara García Pocero.
Una vez que tenemos claro que ser vegetariano es una buena opción en cada etapa de la vida, la nutricionista os explica qué tres formas hay de seguir este patrón de alimentación y qué diferencias existen entre unas y otras.