Keto: advertencias y riesgos sobre la nueva dieta moda en Internet
Sin supervisión médica este plan alimentario tiene un efecto rebote muy alto
Entre sus efectos secundarios están los mareos, el cansancio o el mal aliento
Probablemente hayas probado más de una dieta a lo largo de tu vida. Bajas en calorías, en grasas, en proteínas… en definitiva, muchas variantes con un mismo fin: encontrar el santo grial del adelgazamiento. En nuestro país, el 25% de la población sufre problemas de sobrepeso u obesidad, según los datos del XXI Congreso de la Sociedad Española de Cirugía de la Obesidad Mórbida y de las Enfermedades Metabólicas (SECO), celebrado en Madrid a principios de septiembre.
Ante esta tendencia en aumento, surge en redes sociales un nuevo plan alimenticio que, aunque no es nuevo, promete rapidez y eficacia: la dieta keto. Seguramente ya hayas oído hablar de ella en alguna ocasión. Quizá te suene más si la denominamos dieta cetogénica. Hemos hablado con Evelyn Martín Moraleda, nutricionista de la Clínica Forma y Toletvm Crossfit, para aportar luz sobre los beneficios y peligros de este tipo de alimentación.
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Qué es la dieta keto
Se trata de una dieta restrictiva, muy baja en carbohidratos, que representan el 5% de la alimentación, y muy alta en grasas, que suponen el 65%. "Este tipo de alimentación provoca una pérdida de peso muy rápida en las primeras semanas debido a que el cuerpo entra en cetosis. Esto significa que obligamos al cuerpo a utilizar las grasas como principal fuente de energía, en lugar de los carbohidratos", explica la dietista. Además, se elimina el consumo de la mayoría de frutas, exceptuando las bayas, y de las verduras que crecen bajo tierra.
Y es esa rapidez, precisamente, lo que la ha convertido en tendencia. Sin embargo, como suele ocurrir con las 'dietas milagro', la keto puede tener un efecto rebote muy alto. "Al no almacenar ni carbohidratos y por lo tanto, tampoco agua, el cuerpo se deshincha temporalmente y de forma rápida. El problema es que cuando se vuelven a consumir esta sensación desaparece, ya que la pérdida inicial ha sido de líquidos y no de grasas", declara Martín.
Siempre de la mano de un experto
Esto no quiere decir que este tipo de alimentación no se pueda seguir en ningún caso. "Depende del objetivo de cada persona. Hay investigaciones que apuntan que, realizándose de forma adecuada, no suponen ningún riesgo para la salud. Pero siempre tiene que realizarse de la mano de un experto”, asevera la nutricionista.
El cambio de los porcentajes de ingesta de alimentos no puede hacerse a la ligera. Tiene que estar controlado y estudiado para que el organismo no esté en déficit en ningún momento. "Es importante llevar la contabilidad de los cuerpos cetogénicos ya que cada persona responde a este proceso de una manera. Es fundamental que las vitaminas y minerales se mantengan en niveles estables por mucho que haya alimentos que no se consuman", declara Martín.
Este estado de cetosis además de ayudar al cuerpo a adelgazar tiene otra serie de efectos secundarios. Además del mal aliento y la sensación de cansancio, que son los más comunes, pueden producirse también mareos, sobre todo en aquellas personas que realizan esta dieta sin ningún tipo de control médico, ya que el cuerpo no está acostumbrado a niveles tas bajos de hidratos.
Cómo evitar el efecto rebote
Con todo lo anterior, la experta recomienda ponerse en manos de un especialista antes de llevar a cabo cualquier plan nutricional y no dejarse guiar por las modas de internet. "Cada caso es específico y tiene unas particularidades", añade.
"Generalmente lo mejor es seguir una dieta lo más parecida posible a la alimentación normal, reduciendo las calorías y eligiendo los alimentos adecuadamente. Bajar peso de forma saludable debe estar asociado a un cambio de hábitos, solo así se evitará el efecto rebote del que hablábamos. Eso sí, sin llegar a los niveles de la keto, yo recomiendo bajar la ingesta de carbohidratos hasta el 35% en lugar del 60 que a día de hoy es lo normal", concluye Martín.