Todos tenemos una maleta llena de experiencias que vamos metiendo a lo largo de la vida. A veces son maletas livianas, con pocas cosas pero muy queridas, y otras son maletas pesadas en las que ha habido de todo un poco. Ojalá tu maleta esté llena de cosas bonitas, que hayas guardado en tu memoria y ojalá vayan entrando otras mucho mejores que quedan por llegar.