Javier Ruiz, sobre la semana de cuatro días: “No se trata de trabajar menos, sino de hacerlo distinto”
Como cada semana, Javier Ruiz nos explica en 'Money Talks' la actualidad económica
En esta ocasión, hablamos sobre la reducción de los días laborables
“Existen dos modelos, uno basado en la productividad y otro en la precariedad”
Los datos del paro son extraordinarios. Tenemos, por primera vez desde 2008, una caída por debajo de los 3 millones y se sitúa en el 13%, que está muy bien si analizamos por lo que hemos pasado. Además, todo apunta a que no se ha tocado suelo y que, con la campaña de verano, siga cayendo más hasta septiembre.
Tenemos un millón de parados menos que hace un año y medio, y medio millón menos que durante la pandemia del coronavirus. Además, la calidad del empleo también ha mejorado. La nueva reforma laboral está haciendo que los contratos fijos pasen de uno de cada 10 a uno de cada dos. En esta nueva realidad, vuelve a resonar la jornada de cuatro días. Un modelo que ya está en marcha en Bélgica. Como cada semana, Javier Ruiz nos explica en ‘Money Talks’ cuáles son las diferentes opciones con las que se puede llevar a cabo y la viabilidad en los diferentes sectores económicos.
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Modelos de jornada de cuatro días
Antes de hablar de la positividad o no de esta medida hay que entender que existen dos formas de llevarlo a cabo. “Existen dos modelos, uno basado en la productividad y otro en la precariedad”. Por un lado, tenemos la opción de mantener las jornadas de 40 horas semanales, pero distribuirlas en cuatro días, en lugar de en cinco. Es el modelo belga y es lo que se llama flexibilidad laboral.
Además, permite compensar entre semanas, siempre y cuando a final de mes se cumplan las horas que están dispuestas en el contrato. Este modelo es factible ya que, debido a la evolución de los puestos, en la mayoría de las empresas se trabaja por objetivos, cumpliendo proyectos y no tanto por horas de trabajo continuo, como podía ocurrir en la revolución industrial.
La otra fórmula de esta jornada de cuatro horas es más preocupante, ya que se basa en la reducción de horas, pasar de las 40 horas actuales a las 32. Eso implica un incremento de los costes salariales y supondría un aumento del 20% de los sueldos a todos los trabajadores de España y es insostenible, estaríamos poniéndonos un lastre en nuestra economía.
¿Dónde está el riesgo?
En Bélgica, este modelo de jornada de cuatro horas está acompañado de otro apunte, permite al trabajador hacerlo para más de un empleador. El riesgo de hacer esto en España que se termine asumiendo que para tener un sueldo digno hay que trabajar en dos empresas con dos mini sueldos. Javier Ruiz explica la precariedad que implicaría que esto ocurriese en España y los sectores en los que sí y en los que no es factible la jornada de cuatro días en nuestro país.