Prácticamente la totalidad de España está sumergida en una nueva ola de calor aún más sofocante que la que llegó hace unas semanas a nuestro país. Tanto que se espera que las altas temperaturas no comiencen a descender hasta que pase el fin de semana, alcanzando hasta 47 grados de temperatura máxima en zonas de Extremadura. Si nosotros sufrimos, los animales también, por eso es importante cuidar y prestar atención a su estado durante estos días, en especial a los perros, que deben salir a dar sus paseos a la calle, donde el calor es aún más fuerte en el suelo, lugar en el que se concentra la máxima temperatura.
Así lo explicaba el meteorólogo Mario Picazo hace unos días en sus redes sociales, exponiendo una imagen de España capturada por Copernicus en la que se ve la temperatura del suelo del 9 de julio en toda la península ibérica. En ella se ven zonas de Extremadura donde la temperatura del suelo supera los 60 grados y en gran parte del suroeste de queda por encima de los 50 grados.
Ante ello, un seguidor ha recordado que hay que tener cuidado en sacar a pasear a las mascotas y hacer una prueba con un gesto tan sencillo como tocar el suelo. Si te quemas, tu mascota también va a quemarse las patas, por lo que es primordial evitar las horas en las que más calor se concentra.
Este es el consejo que da la Guardia Civil a los dueños de las mascotas, promoviendo que se utilice la llamada regla de los cinco segundos que consiste básicamente en que, antes de sacar a pasear a tu perro, pongas la mano en el asfalto. Si no aguantas ese calor durante los cinco segundos, ellos tampoco, más teniendo en cuenta que sus almohadillas son más delicadas.
Por ello, uno de los consejos principales es sacarlos a pasear a primera hora de la mañana y a última de la tarde, cuando las temperaturas extremas ya han remitido, pero sobre todo hay que suprimir el paseo de medio día si las temperaturas son excesivamente altas.
No obstante, si al lado de casa hay zonas con sombra o césped, siempre puedes sacarlo ahí. La sombra hará que la temperatura sea algo más baja y el terreno no queme tanto, especialmente en zonas de césped, mucho más frescas, limitando todo lo posible el paseo por las aceras y el asfalto.
Además, si a ti en los paseos te viene bien algo de agua, a tu perro también, así que no está de más llevar una botella de agua fresca para usarla en caso de que veas que hace demasiado calor. De esta manera puede beber o puedes refrescarle las patas, el morro o la zona de la barriga.
Puntualizando en sus patas, para algunos perros puede serles de ayuda llevar protectores, una especie de calcetines, pero no para todos es cómodo, menos con el calor del verano. Sin embargo, pueden ser de utilidad especialmente si tienen alguna herida en las almohadillas.