{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
Si uno pronuncia bien Joaquin Phoenix en inglés, el apellido suena a Fénix, que simboliza el renacimiento, el resurgir de las cenizas. Al actor, que ha resurgido varias veces personal y profesionalmente, se le pueden criticar muchas cosas pero, lo que es indudable, es su compromiso con la protección del mundo animal. Ahora, el intérprete, de 45 años, ha rescatado a una vaca y su hija de ser sacrificadas en un matadero. Esta es la historia.
"Nos sentimos con derecho a inseminar artificialmente a una vaca y, cuando ella da a luz, robarle a su bebé. Aunque sus gritos de angustia son inconfundibles. Y luego tomamos su leche, que era destinado a su ternero, y lo ponemos en nuestro café y nuestro cereal". No son las palabras de ningún miembro de PACMA en una manifestación, sino las del actor Joaquin Phoenix en el mismísimo escenario del Dolby Theatre de Los Ángeles después de haber ganado el premio a mejor actor por su papel en 'Joker'.
Reconocido vegano y activista de los derechos animales, al finalizar la gala, Phoenix y su novia, Rooney Mara, se fueron a cenar un par de hamburguesas veganas a la puerta del Monty's Good Burguer, un famoso restaurante de este tipo de comida. El actor no come ningún tipo de carne desde que toda su familia lo decidiera, allá por 1977, cuando iban a bordo de un barco desde Venezuela a Miami y vieran a los pescadoras sacando a los peces del mar y dejándolos clavados en unos pinchos en la pared del buque. "Fue un episodio tan violento que nadie de la familia supo reaccionar. Aún tengo la expresión de la cara de mi madre grabada en mi cabeza", reconoció el actor.
Al día siguiente de ganar el premio Oscar, el 10 de febrero, Phoenix, Rooney Mara, la madre de esta, junto con una cohorte de activistas y medios, se fueron hasta un matadero en Pico Rivera (California) para intentar salvar a algún animal de su sacrificio.
Dicho y hecho. Lo primero fue convencer al director del matadero para llevarse a un par de vacas a un santuario de animales y que pudieran vivir en libertad, algo que no le costó especialmente a Phoenix. "Nunca pensé que encontraría amistad en un matadero, pero al conocer a Anthony (Presidente / CEO del matadero( y abrirle mi corazón al suyo, me doy cuenta de que podríamos tener más en común que diferencias. Sin su acto de amabilidad, Liberty y su becerro, Indigo, habrían encontrado una terrible desaparición", manifestó el actor.
Tras bautizarlos como Liberty e Indigo, Phoenix siguió insistiendo en el 'buen rollo' creado con el director del matadero: "Mi esperanza es que, mientras vemos crecer al bebé Indigo con su madre Liberty en Farm Sanctuary, siempre recordaremos que pueden surgir amistades en los lugares más inesperados; y no importa nuestras diferencias, la amabilidad y la compasión deben gobernar todo lo que nos rodea".
Para terminar, Phoenix se mostró ilusionado: "Aunque continuaremos luchando por la liberación de todos los animales que sufren en estos sistemas opresivos, debemos hacer una pausa para reconocer y celebrar las victorias y las personas que ayudaron a lograrlas. Shaun Monson, Amy Jean Davis y toda la comunidad de LA Animal Save de Los Ángeles, se han tomado la molestia de dar testimonio y lo han convertido en una defensa efectiva y diplomática para los que no tienen voz. Como resultado, Liberty e Indigo nunca experimentarán crueldad o el toque de una mano dura".
Ahora, Indigo y Liberty crecen tranquilamente en un santuario de animales de Los Ángeles.