¿De techo o de suelo? Cómo elegir el mejor ventilador para este verano

Ahora sí, parece que el verano empieza a asentarse antes de que empiece oficialmente. Las temperaturas comienzan su ascenso antes de que los primeros afortunados preparen su maleta para irse de vacaciones y disfrutar de unas semanas de descanso. Sin embargo, otros tantos tienen que seguir en casa hasta que les llega su turno, un momento en el que tiene que soportar las altas temperaturas en casa, por lo que el que no tiene aire acondicionado se piensa instalarlo o ir a la solución más rápida: un ventilador. Pero ¿cuál es el idóneo? ¿El de techo o uno de suelo?

Ahora que las temperaturas empiezan a venirse arriba y muchos cambian la oficina por un rincón de casa para teletrabajar hace que se disparen las ventas de los ventiladores. Para elegirlo va a depender mucho cómo lo vayas a usar, si hay que refrescar a más de una persona o el tamaño de la habitación.

Ventiladores de suelo

Los ventiladores de pie, por ejemplo, son ideales para habitaciones grandes por su potencia, siendo capaces de repartir el fresco hasta el último rincón. En cambio, los de suelo son algo más discretos, pero más pesados. Pensados también para grandes espacios, lo cierto es que también están preparados para exteriores, como las terrazas, gracias a su fuerza y sus materiales, resistentes a las condiciones que se pueden dar fuera de casa.

Por su parte, los ventiladores de mesa son perfectos, por ejemplo, para tus jornadas de trabajo en casa. Gracias a su reducido tamaño puedes colocarlos en cualquier lado y regularlos para que te de el fresco que necesitas, aunque su principal hándicap es que no tiene tanta potencia. En el caso de los de torre, suelen ser cómodos, discretos y silenciosos, ideales para trabajar o para el salón, pero no para espacios demasiado grandes.

Ventilador de techo

¿Y qué hay de los ventiladores de techo? Mientras que los ventiladores anteriores pueden moverse tranquilamente al ser de suelo, los de techo no. Para unos son estéticos, mientras que otros no los pueden ni ver, pero para ello su diseño se ha ido mejorando con el paso de los años.

Una de sus ventajas es que reparten el fresco por toda la sala, por lo que son demandados especialmente para los salones y los dormitorios, aunque la parte mala es que hay que instalarlos, buscar una toma de corriente y mirar bien su peso para que el techo no nos de problemas.