Nos sentimos más solos que nunca. Es el resultado del estudio de la aplicación Nextdoor, que en base a una muestra de 2.000 vecinos, ha establecido que más de la mitad han sentido la soledad desde que comenzó la pandemia y, a su vez, conocen a alguien que también la ha sentido. No es de extrañar, viendo los datos de hogares unipersonales España: más de 4.700.000 de personas vivieron solas en 2019, según el Instituto Nacional de Estadística (INE), de las cuales más de dos millones tienen 65 o más años. Ahora, una iniciativa lucha contra la soledad impuesta por la pandemia y permite conectar a las personas que no tengan nadie con quien pasar estos días de festividad.
Se trata de una campaña en la que, a través de un mapa de ayuda, las personas registradas en Nextdoor pueden participar encontrar a personas que estén solas. Con ello y a través de grupos, el hecho de compartir aficiones, videollamarse o quedar para tomar algo se hace mucho más fácil en un momento en el que las restricciones dificultan la libre circulación de las personas. Ello hace que sea más fácil conectar con personas que, sin mediación tecnológica, sería imposible haber conocido debido a las medidas de prevención.
La responsable del proyecto en España, Joana Caminal, explica que el primer paso ha sido "estudiar si la soledad es un sentimiento creciente en los españoles debido a la pandemia" para poder identificar "dónde y cómo podemos ayudar". Buscan, por tanto, "crear conciencia" acerca de una problemática muy real y acrecentada por la crisis sanitaria. En el portal también se incluyen testimonios de expertos en soledad que dan consejos, así como herramientas o recomendaciones para identificarla y combatirla. Queda espacio para compartir historias de personas que se han atrevido a hablar abiertamente acerca de ella, con el objetivo de inspirar a aquellos que la siguen considerando un tabú.
Suele ser una de las épocas del año más feliz, pero este año ni eso. El estudio llevado a cabo por Nextdoor asegura que más de la mitad de los encuestados dicen tener "menos ganas de celebrar las Navidades" que en otros años. Cerca de un 44 % temen quedarse aislados durante las fiestas debido a las medidas de prevención y las restricciones sanitarias. Hay tres tipos de soledad a este respecto: la vinculada a las relaciones sociales (vinculada sobre todo al confinamiento y a estas fechas en especial), la de la pérdida de las personas íntimas y la vinculada a no cumplir proyectos vitales, según destaca la Psicogerontóloga Montserrat Cedrán.
Tener que abandonar el entorno laboral físico ha supuesto, para muchos, un sentimiento de orfandad encontrada debido al aislamiento impuesto por la pandemia. El estudio señala que un 38 % de los encuestados se sienten solos desde que han adoptado esta dinámica laboral, llegando hasta el 71 % en el caso de los que han sufrido un ERTE. La peor parte se la llevan los desempleados, que además del sentimiento de vacío productivo se sienten muy solos en el 77 % de los casos. Los hijos de los mismos, especialmente aquellos que iban a empezar con su etapa laboral tras la universidad, también lo sienten así: un 63 % afirma echar de menos el contacto humano, sobre todo los estudiantes que han adoptado el formato telemático.
La proximidad que ofrecen los barrios pueden ser un factor a tener en cuenta para combatir este sentimiento. "La decisión de cómo se diseña una ciudad para crear espacios de socialización o no, son clave", explica Montserrat Cedrán. "Las personas deben sentir que forman parte de una comunidad y tener lo que necesitan al lado de casa: personas, vida, comercios, lugares para relajarse y relacionarse", apunta. Por ello, la mediación tecnológica de Nextdoor puede ayudar a que personas que no se conocían y que vivían cerca estrechen relación en el caso de pasar las Navidades a solas y, por qué no, celebrar estos días juntas.