Nuevas elecciones pandémicas. Tras Galicia, País Vasco y Cataluña hoy es el turno de la Comunidad de Madrid que abre los colegios electorales para decidir quién presidirá la región durante los próximos años. Como en otras, se ha establecido un protocolo para evitar aglomeraciones en los recintos y horarios especiales para los más vulnerables que, precisamente, tienen el voto clave, pues según algunas de las últimas encuestas, como la de Nc Report para el diario La Razón, los mayores de 45 años son los que tienen el poder de decisión. ¿Por qué?
A pesar de ser día laboral, se estima una participación de la población madrileña en torno al 70%. Pero esa participación no es igual a cualquier edad. Según el informe citado, de los ciudadanos de entre 18 y 44 años solo un 34'8% ha manifestado su intención de ir a votar, algo muy diferente a los mayores de 45. Los uppers, tal y como indica la encuesta, tienen más intención de voto, elevándose hasta un 65'2%. Por tanto, es la franja de edad que más poder tiene de decisión sobre los resultados electorales finales.
Lo cierto es que esto no es ninguna sorpresa, pues la historia electoral deja claro que el voto de los mayores, especialmente por encima de los 65 años, ha sido en muchas ocasiones decisivo. En las últimas elecciones generales de noviembre de 2019 los mayores de 65 suponían el 24'7% del censo electoral y precisamente son los que más tradición de voto tienen y menos abstención presentan.
Durante aquella campaña electoral, Metroscopia representó la diferencia generacional en cuanto a participación de voto. Mientras que en la última década el 60% de las personas entre 18 y 35 años habían acudido a las urnas, en la población comprendida entre los 35 y los 54 años el porcentaje se elevaba hasta el 73%. Pero cuando se habla de mayores de 55 la cifra sigue en aumento hasta alcanzar el 80%. De esta manera, y por la intención de voto, está claro que son los mayores de 45 los que más uso hacen de su derecho a voto y, por tanto, su papeleta es clave en los resultados electorales.
Ya en las elecciones generales de 2016 los mayores de 55 se estima que tuvieron una participación del 79%, frente al 77% de las de 2015 y el 82% de las de 2011, según datos de Metroscopia. Muy por encima de la franja de edad comprendida entre los 35 y 54 años, un 68% en 2016, un 73% en 2015 y un 70% en 2011. Por no hablar de los menores de 35 años con porcentajes que se alejan bastante de los anteriores, un 61% acudió a votar en 2016, un 66% en 2015 y solo un 58% en 2011.
Los colegios electorales madrileños se mantendrán abiertos desde las 09:00 hasta las 20:00 horas, aunque se han habilitado horarios especiales para mayores de 65, a los que se recomienda votar entre las 10 de la mañana y las 12 del mediodía. Además, para las personas contagiadas, asintomáticas, que crean que tienen coronavirus o estén a la espera de un resultado se les ha asignado el horario de 19:00 a 20:00 horas para evitar que coincidan con el resto de la población sana.
Entre las recomendaciones está llevar el voto preparado desde casa para agilizar las votaciones además del uso obligatorio de mascarilla y gel hidroalcohólico. En los centros se respetará el aforo y la distancia de seguridad y solo se podrá retirar la mascarilla si la mesa así lo requiere para identificar a la persona tras mostrar el DNI.
Al ser elecciones en día laborable, los trabajadores tienen derecho a abandonar su puesto de trabajo durante un periodo de tiempo en caso de que su horario coincida con la apertura de los colegios electorales. Dependiendo de la coincidencia, los empleados tendrán derecho a un permiso de entre dos y cuatro horas para acudir a votar y luego volver al puesto de trabajo.