Entre el Batman de leotardos y psicodelia light de Adam West y el Batman 'emo' de Robert Pattinson hay para todos los gustos. Pero también para todas edades. Pattinson es el más juvenil, seguido de Christian Bale en las cintas de Christopher Nolan. Ben Affleck es un Batman un poco más maduro y de vuelta de todo, pero es solo ahora con su aparición en 'The Flash' que el retornante Michael Keaton cierra el círculo al componer un batman otoñal.
No, no vamos a enfrascarnos nuevamente en la eterna discusión de quién es el mejor Batman. De hecho ni siquiera hemos mencionado aquí a Val Kilmer o George Clooney (quien no se cansa de pedir disculpas por 'casi liquidar' la franquicia), pero sí podemos asegurar que Michael Keaton es el que más se ajusta a la realidad de Batman: el héroe tiene ya 84 años y finalmente es interpretado por un actor que se le acerca en edad, con 72 años. Es decir, si el Batman que debutó en los cómics en 1939 viviera, se parecería más al Micahel Keaton actual que a cualquiera de los otros actores.
'I'm Batman'. Hoy en día es casi imposible para cualquier fan decir esa frase sin poner una voz grave y cavernosa. Pues bien, ese detalle que ahora parece tan consustancial al superhéroe, no existía antes de Keaton, a quien simplemente le pareció 'lógico' que Bruce Wayne escondiera su identidad impostando la voz. Fue uno de los muchos detalles con los que el personaje rompió, en ese momento, con la caracterización lúdica y naif de Adam West en la entrañable serie de televisión de los sesenta.
Porque contrariamente a lo que se cree, en realidad Batman no fue siempre 'oscuro'; y como muchos otros super héroes, sus orígenes comiqueros estaban pensados más bien para un público infantil. No fue hasta mediados de los setenta y sobre todo en los ochenta, que los sucesivos guionistas y dibujantes de los cómics explotaron de manera magistral el trauma de su origen y lo convirtieron en el personaje oscuro que ahora conocemos.
Burton y Keaton bien podrían haberse quedado en la actualización efectista y estilística del murciélago (y vaya que Burton revolucionó el look del personaje), o explotar la vena acrobática o incluso humorística del guión (no olvidemos que ambos venían de hacer dupla en una comedia extravagante: 'Beetlejuice'), pero fue el actor el que supo imprimirle complejidad al carácter. Hay en su interpretación un punto excéntrico y a la vez atormentado que también ha dejado huella. "¿Quieres que nos volvamos locos? ¡Volvámonos locos?", por ejemplo, era una frase que ni siquiera estaba en el guión y que Keaton se sacó de la manga en una escena que compartía con el mismísimo Jack Nicholson (un Joker a ala altura) y Kim Bassinger.
En 'The Flash', el protagonista de la cinta retrocede en el tiempo y la lía con el multiverso. Nada muy original y que no haya hecho Marvel antes. Es entonces cuando aparece el Batman interpretado por Keaton: pero es un Cruzado Enmascarado retirado, canoso, viejo. Pero como cuando se nace superhéroe se es superhéroe hasta la muerte (ejem, ejem), el veterano Bruce Wayne vuelve a enfundarse en el traje más chulo de todos los Batmans de todos tiempos (el de la insignia amarilla en el pecho) y cumple con su deber para regocijo de los fans. Los guiños a las dos películas de Burton que protagonizó son, además, muchos y muy satisfactorios. Una actualización del personaje que ojalá tuviera continuidad. Quien sabe, si incluso Christian Bale ha dejado la puerta abierta... tal vez haya más vida para el Batman de la tercera edad de Michael Keaton. Sea como sea, Batman forever (y no, nos referimos a esa película).