Un viejo y conocido axioma dice que "Chuck Norris entró una vez a un Burger King y pidió una Big Mac. Y se la dieron". Secundario en películas de Bruce Lee en los 70, héroe de acción en los 80, Texas Ranger televisivo en los 90 y protagonista de casi todos los memes de tipo duro (quita allá, Pérez Reverte) en los 2000, el buen Chuck lleva ya más de una década alejado de la pantalla. ¿Por qué?
Chuck Norris nació en marzo de 1940. Antes de cumplir los 22 años ya había sido policía militar, servido en Corea y aprendido las artes del Taekwondo, el Tang Soo Do, el Judo y algo de Hapkido. A os 32 protagonizó junto a Bruce Lee y en pleno Coliseo Romano, una de las luchas más míticas del cine de artes marciales. Y a los 38 años era campeón Mundial de Karate Do en la 'vida real'. Todo esto para decir que sí, tiempo pasa también por Chuck Norris. Y ahora, a los 84 años, podemos verlo casi como un tierno abuelito, compartiendo frases motivacionales (y eso sí, pegando guantazos todavía) en sus redes sociales. Los años no te quitan lo duro, si eres Chuck Norris.
Es verdad que para finales de la primera década del nuevo milenio, Chuck ya no era la estrella de primer nivel del mamporrazo que había sido, su brillo televisivo empezaba a menguar también, pero nada hacía suponer a sus fans que el multicampeón de artes marciales se retiraría de manera tan abrupta. Y en realidad lo hizo por amor.
El actor lleva casado con Gena O'Kelley nada menos que 26 años. Uno de esos matrimonios rara avis en la industria. Sin embargo, todo se torció para la pareja cuando a ella le detectaron una artritis reumatoide en 2013. No parecía la noticia más terrible, a priori, pero la cosa empeoró drásticamente cuando Gena fue sometida a una serie de resonancias magnéticas como parte de su tratamiento. Lejos de mejorar, la salud de la mujer fue empeorando y en 2017 los médicos llegaron a la conclusión de que sufría envenenamiento por gadolinio, una sustancia utilizada para poder hacer esas mismas resonancias.
Fue entonces que Chuck lo dejó todo. "Toda mi vida se centra en cuidar de ella lo mejor que pueda. He renunciado a mi carrera cinematográfica", dijo. Para entonces Gena ya no podía moverse, ni siquiera alimentarse por sí misma y había que hacerlo a través del esófago. Norris se mantuvo a su lado hasta que el envenenamiento fue remitiendo meses después y empezaba una lenta convalecencia. El actor demandó a la compañía fabricante de las máquinas de resonancia, pero posteriormente retiró la demanda.
El caso es que desde entonces, aunque ha tenido alguna que otra aparición esporádica en alguna serie, Chuck no ha vuelto a rodar ninguna película. Aunque nunca se sabe: dicen que el tiempo no pasa por Chuck Norris, Chuck Norris pasa por el tiempo.