'Elvis', el biopic musical sobre el Rey del Rock que ha dirigido Baz Luhrmann, vuelve a poner el foco sobre la mítica figura de uno de los mayores íconos del siglo XX, y lo hace confrontando el magnetismo más grande que la vida que desprendía Elvis Aaron Presley con la tenebrosa presencia en la sombra del coronel Tom Parker, el tipo que dirigió con mano de hierro la trayectoria del cantante durante 22 años.
En la película está interpretado por un Tom Hanks cubierto de toneladas de maquillaje como un trilero astuto, manipulador y egoísta, a ratos fascinante y a ratos repulsivo, capaz de cualquier cosa para salirse con la suya, incluso de coartar, esclavizar y azuzar la adición a los fármacos que terminaría llevando a la muerte a su protegido, pero ¿quién fue en la vida real esta figura clave en la carrera de Presley que Luhrmann ha convertido en el inequívoco villano de su barroca función?
Nacido en 1909 en Breda, Países Bajos, Andreas Cornelis van Kuijk se involucró desde muy joven en los shows circenses y barracas de feria que había en su ciudad y que preconfigurarían su atracción por el mundo del espectáculo. A los 20 años llegó a Estados Unidos como inmigrante ilegal y se alistó en el Ejército con el nombre de Tom Parker. Tras dos años de servicio, desertó de su batallón y posteriormente fue expulsado del Ejército tras descubrirse que era mentalmente inestable, algo que se aborda en la película de Luhrmann.
En 1935 se estableció en Tampa, Florida, y se casó con Mariane Mott. Regresó durante un tiempo al mundo de los feriantes, pero después probó suerte en la promoción de estrellas de la música, trabajando con artistas como Gene Austin, Minnie Pearl, Eddy Arnold y Hank Snow. Fue este último quien llevó de visita a uno de sus shows a un entonces joven músico llamado Elvis Presley. Parker, que ya entonces había adoptado el falso rango de 'Coronel', vio que ese chico traía el futuro debajo del brazo y que ese futuro le podía cubrir de millones de billetes.
En 1955 el Coronel firmó un contrato con Elvis para ser su representante y mánager. Pasó a gestionar su carrera a tiempo completo. Bajo su dirección se produjo la firma con la discográfica RCA y se publicaría en enero de 1956 el sencillo 'Heartbreak Hotel'. La leyenda había nacido y Parker se encargó de explotarla a través de todo tipo de productos y apariciones en televisión y películas. Casi se podría decir que inventó el merchandising mucho antes que George Lucas con Star Wars. Además, Parker se llevaba hasta el 50% de las ganancias del cantante, en una época en la que la mayoría de los representantes se quedaban con entre el 10 y el 15%.
En la película se hacer ver que en esos primeros tiempos el Coronel intentaba que Elvis suavizara su imagen y dejara atrás sus controvertidos y sensuales movimientos en el escenario para evitar escándalos, pero según Alanna Nash, considerada la biógrafa oficial de Parker y autora de 'The Colonel: The Extraordinary Story of Colonel Tom Parker and Elvis Presley', a Parker le encantaba que "Elvis fuera como un artista de striptease masculino. ¡Eso vendía entradas!".
Sin embargo, sí hay mucho de cierto en el carácter manipulador de el Coronel. En el documental de HBO 'Elvis: The Searcher', el crítico musical y manager Jon Landau explicaba que “Parker no estaba interesado en que Elvis se convirtiera en alguien demasiado independiente. Necesitaba que Elvis creyera que todo lo bueno procedía de él, y que todo lo malo venía de enemigos imaginarios. Mantuvo ese engaño durante demasiado tiempo”.
Parker alentó al cantante a alistarse en el ejército en 1958 después de recibir un aviso de servicio militar obligatorio y cumpliera con su obligación. Así demostraría al mundo que era como cualquier otro ciudadano estadounidense y aplacaría a los críticos que le acusaban de corromper a la juventud. A su regreso del Ejército, el Coronel se centró en que Elvis hiciera (malas) películas, apariciones en televisión familiares y álbumes poco relevantes. Priorizó cantidad sobre calidad y contribuyó al declive del artista, sobrepasado por los nuevos sonidos que llegaron en los 60 con Beatles y Rolling Stones como punta de lanza.
Diez años después de haber protagonizado la mayor revolución musical del siglo XX, Elvis era percibido como una auténtica antigualla y tuvo que ser el especial de televisión de 1968, en el que retomaba gran parte de la autenticidad original, lo que le pusiera de nuevo en la cima. El Coronel aprovechó la coyuntura para mandar a Elvis de gira, e incluso le consiguió una residencia en un lujoso hotel de Las Vegas, muy lucrativa económicamente pero que a la larga acabaría arrastrando al artista a la irrelevancia.
En 'Elvis' se muestra cómo el Coronel retrasa deliberadamente la gira internacional que Elvis desea realizar, prolongando más allá de lo deseable su residencia en Las Vegas con el fin de pagar sus propias deudas de juego con el Hotel. En su libro 'Elvis: Taking Care of Business', el periodista David English habla sobre la presión que ejerció el Coronel en la última etapa de vida del músico, bien reflejada en la película: “Tenía enormes deudas con los casinos, y fue influenciado para hacer estos acuerdos que no eran necesariamente adecuados para su cliente. Elvis siempre respetó a Parker, así que pensó: 'está haciendo lo mejor para mí'".
Respecto a las giras, es cierto que Elvis nunca salió de América del Norte, ya que Parker únicamente le permitió actuar en Canadá. Se creía que el estatus del Coronel como inmigrante ilegal le prohibía viajar ya que no tenía pasaporte, ni podría obtenerlo debido a que sus papeles no estaban en regla, aunque él se escudaba en problemas de seguridad y que en los países extranjeros no estaban a la altura en este aspecto para recibir al ídolo.
Para la biógrafa de Parker la teoría de que estaba bajo presión de las fuerzas gubernamentales que amenazaban con exponer su pasado, como un nativo no estadounidense de Holanda, "es una una tontería total e inequívoca, una completa invención en la película". "Cuando el coronel Parker se alistó en el ejército de los EEUU, se declaró ciudadano holandés, con padres nacidos en Holanda. Él solo tuvo que jurar que se convertiría en ciudadano estadounidense, aunque al final no lo hiciera", explica.
Otro punto polémico de la visión de Luhrmann es cuando Elvis monta en cólera al enterarse de los tejemanejes de su manager y durante una actuación anuncia en el escenario cruelmente que Parker está despedido. Nash niega este extremo. La escritora sí reconoce en una entrevista en 'Variety' que el cantante y el Coronel tuvieron un incidente entre bastidores en Las Vegas en 1974 pero que "Elvis de ninguna manera habría sido tan grosero como para haber despedido al Coronel del escenario".
La adicción del Coronel a los juegos de azar sí es real. "Elvis nunca supo cuántos conciertos dio gratis para satisfacer la esclavitud de Parker a la rueda de la ruleta y la mesa de dados. De hecho, el Coronel ni siquiera tenía que bajar al casino. El hotel traía una rueda de ruleta a su habitación", cuenta Nash. Mientras, la salud la salud del cantante se deterioró progresivamente a medida que se volvió dependiente de los medicamentos recetados para cumplir con el agotador programa de recitales y dormir por las noches.
Tras la muerte de Presley, el 16 de agosto de 1977, Parker siguió ganando dinero a costa del legado de la estrella y finalmente fue demandado por los herederos de Elvis por su mala gestión. En 1980, la nueva administración del patrimonio del músico quedó completamente en manos de su hija, Lisa Marie Presley, mediante una sentencia judicial que dejó de lado a Parker y puso fin a sus funciones como administrador. Terminó retirándose silenciosamente del negocio de la música, aunque para ello en 1983 tuvieron que pagarle 2 millones de dólares por su "derecho, título e interés" en todos los contratos relacionados con Elvis.
Aun así, el Coronel siguió pareciendo en eventos relacionados con el mito y continuó viviendo en la misma suite que había ocupado en el Hilton de Las Vegas desde que trabajaba con él. Finalmente fue desalojado cuando sus deudas contraídas en los juegos de azar superaron los 30 millones de dólares. El 20 de enero de 1997 Parker sufrió un derrame cerebral y murió al día siguiente. Tenía 87 años. Su biógrafa no está de acuerdo con la visión que de él se da en la película ."Al convertirle en antagonista, le han despojado de sus muchos logros con Elvis Presley", opina. Pero ya se sabe, a veces una buena historia vale tanto como su villano.