¿Cuál es el origen de la curiosa amistad entre Muhammad Ali y Elvis Presley?

  • Uno se proclamó 'Rey del boxeo' y el otro 'Rey del rock', dos mundos totalmente opuestos que no fueron una traba para esa amistad

  • Se conocieron cuando eran mundialmente aclamados y cada uno sentía una enorme admiración por los logros del otro

  • Sellaron su amistad para siempre con dos regalos inolvidables con una firma que dejó huella

En enero pasado, Elvis Presley hubiera cumplido 87 años. Su capacidad para componer y cantar revolucionó la música en Estados Unidos y se alzó para la eternidad como el Rey del Rock. Ese mismo mes y en la misma tierra, pero siete años más tarde que Elvis, nació Cassius Marcellus Clay, también conocido como Muhammad Ali, uno de los mejores boxeadores de todos los tiempos. A pesar de desarrollar sus carreras en ámbitos opuestos, ambos se hicieron amigos. Desde Uppers vamos a recordar cómo se conocieron Muhammad Ali y Elvis Presley y qué le regalo Elvis Presley a Muhammad Ali y viceversa para sellar su amistad.

El que se convirtió en tricampeón del mundo de pesos pesados dejó huella en su generación y en la política gracias a su implicación en la lucha social y humanitaria a favor de los afroamericanos y del islam. Además, contaba que de adolescente era un fan incondicional de Elvis y quería ser como él. El libro Running with The Champ escrito por Tim Shanahan, describe que ya con 15 años Muhammad Ali admiraba tanto al cantante que se propuso entretener a la gente, “ser querido” y “ser admirado por las chicas", igual que lo había conseguido Elvis.

También relata que quedó impresionado por su promesa de comprarle un coche y una casa a su madre cuando se hiciera rico. De ese modo siguió los pasos de su ídolo; tras ganar su primera pelea profesional compró un Cadillac rosa para su madre y en la segunda una casa para su familia. “Justo como Elvis”, dice Muhammad Ali en el libro.

Cómo se conocieron Muhammad Ali y Elvis Presley

Se conocieron cuando ambos ya eran adultos de fama mundial; con 38 años uno era el “Rey del rock” y con 31 el otro era el “Rey del boxeo”. El 2 de febrero de 1973 en Las Vegas, solo cuatro años antes de la muerte de Elvis, tras un show en Las Vegas Hilton el cantante aceptó recibir en su camerino a Muhammad Ali.

Un encuentro que dio lugar a una gran amistad porque enseguida congeniaron. Como prueba de admiración mutua a los pocos días Elvis regaló a Muhammad Ali una increíble bata de boxeo con incrustaciones de pedrería, del mismo estilo que los espectaculares y originales monos con los que actuaba.

Como respuesta, el boxeador le entregó sus guantes de boxeo, pero antes se los dedicó para siempre. En el guante izquierdo escribió la frase: "Elvis, tú eres el Más Grande. De Muhammad Ali. Paz 1973". En el derecho: "Para Elvis, mi mejor amigo".

Para entonces, las palabras "Soy el más grande" ya eran muy famosas porque el mismo boxeador se las repetía así mismo para afirmar que realmente había conseguido ser el mejor de todos los tiempos.

Una bata de 3.000 dólares que le dio 'mala suerte'

En cuanto a la bata de boxeo, valorada en 3.000 dólares, era larga y blanca, una pieza única que tenía incrustaciones de joyas y piedras brillantes. Elvis encargó a su diseñador esa prenda especialmente para Ali y se confeccionó en el tiempo récord de tres días. Sin embargo, hubo un error. El boxeador era conocido como 'People's Champion' que significa el campeón del pueblo, pero en la espalda de la bata se bordaron lujosamente las palabras 'People's Choice', es decir, elección del pueblo.

Muhammad Ali recibió el regalo y ese mismo día lo estrenó en un combate contra Joe Bugner, en el Centro de Convenciones de Las Vegas, que ganó. Al mes siguiente, el 31 de marzo de 1973, se colocó por segunda vez la bata para subir al ring del Sports Arena de San Diego, California. Se iba a celebrar su primer combate contra Ken Norton. Ali perdió y aunque Norton fue uno de los únicos boxeadores que le ganaron, cuentan que nunca más volvió a colocarse la bata sobre sus hombros; “Consideraba que le había dado mala suerte”.

A los cuatro años de haberse conocido, el 16 de agosto de 1977, Elvis murió en Memphis, Tennessee. Hasta el día de hoy no se sabe a ciencia cierta si la causa de su fallecimiento fue un paro cardiorrespiratorio, la medicación que tomaba para diversas afecciones o una combinación de ambas.

En un medio de comunicación, Ali recordó a su amigo como “el hombre más encantador, el más humilde y el más bueno que querrías conocer". Igualmente, durante un acto de conmemoración en honor al cantante, que se celebró en 1985, el boxeador, después de cantar para todo el público Don't be cruel, declaró que era “el único chico blanco que tenía alma, que podía cantar tan bien como cualquiera de ellos…”.

Concluyó su discurso con la mítica frase: “Elvis fue el más grande de todos los tiempos". Mucho tiempo después, a los 74 años, murió el tres veces campeón de peso pesado de boxeo Muhammad Ali. Sucedió el 3 de junio de 2006 en Scottsdale, Arizona, tras un choque séptico provocado por causas naturales.