Joaquín Sabina está en plena promoción de su documental ‘Sintiéndolo mucho’ que se estrena en los cines el próximo 17 de noviembre. El artista no está solo, lo acompaña Leiva, que se ha encargado de crear la banda sonora del documental y que, además, ha compuesto algunos de esos temas junto al propio Sabina, y Fernando León de Aranoa, director de la película documental que sigue a Sabina a lo largo de sus últimos 15 años de carrera.
Los tres se encuentran en plena promoción de la película documental ante su inminente estreno en cines y anoche visitaban ‘El Hormiguero’, donde han explicado algunos de los entresijos de todo el proceso de creación y filmación y también de otros aspectos más personales, como de su salud.
“Bebo más que como, pero por prescripción facultativa. El médico me dijo que tenía que beber dos litros diarios, pero me dijo que no hacía falta que fueran de agua, también podían ser de tequila o de whisky”, contaba en directo entre risas. No obstante, aseguró que va “a empezar a cuidarme. Dejé la cocaína hace más de 20 años, pero cuando me pregunta que qué siento ahora, contesto que nostalgia”.
“Ya no te hace ilusión, el efecto que te decía ya no lo sientes y dices se acabó. Pero mi ejemplo no vale para las pobres madres de los yonkis. Yo no me interné en ningún sitio porque dije se acabó”, puntualizó Sabina.
Sobre el documental, asegura que cuenta con un punto “obsceno” porque le dijo al director que podía sacarle “como quisiera, hasta cagando”, y lo cierto es que en el metraje el cantante aparece incluso duchándose. “En los conciertos he enseñado mucho el culo, pero nunca había mostrado el alama porque creo que es una ordinariez”, dijo. Un filmación que se desarrolló sin un plan cerrado, "no lo había. Grabábamos y ya está", dijo el director.
Lo de Sabina, a sus 73 años, es un no parar, pues el próximo año se embarcará en una gran gira que le llevará por toda Latinoamérica, Estados Unidos y por toda España.